Las fuertes lluvias que afectaron al municipio Las Terrenas, en la provincia de Samaná, han causado graves daños en 177 viviendas debido al desbordamiento de ríos, arroyos y cañadas. El rio Las Terrenas y la cañada Caño Seco dejaron afectados a varios barrios y sectores de la localidad. A pesar de no haber personas desplazadas, muchas casas fueron inundadas, escuelas afectadas, transeúntes con el agua por encima de los tobillos y vehículos sumergidos y arrastrados por las corrientes.
Ante esta situación, el alcalde de Las Terrenas, Eduardo Esteban Polanco, activó el comité de emergencia municipal y aconsejó a los residentes cercanos a ríos y cañadas tomar medidas preventivas. Asimismo, se informó que las iglesias del sector serán utilizadas como albergues temporales para las personas afectadas. El Ministerio de Viviendas se comprometió a evaluar la zona para determinar qué viviendas requieren ser reconstruidas o reparadas, y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones envió un informe a la división de ingeniería del Ministerio de Educación para la reparación de los planteles educativos dañados.
El Centro de Operaciones de Emergencia ha declarado alerta amarilla en Las Terrenas y se ha recomendado a la población estar preparada para posibles eventos atmosféricos y tomar las acciones necesarias en caso de emergencia. El meteorólogo Jean Suriel ha instado a la comunidad a estar alerta y preparada, ya que se esperan posibles impactos por las condiciones meteorológicas adversas. Las autoridades han estado trabajando en conjunto para brindar asistencia y apoyo a los afectados por las lluvias, principalmente en la evaluación de daños y la coordinación de albergues temporales para quienes lo necesiten.
A pesar de no haber desplazados, la comunidad de Las Terrenas ha sufrido los estragos de las intensas lluvias que han golpeado la región, dejando casas inundadas, calles convertidas en ríos, vehículos dañados y personas afectadas por las corrientes. Se espera que las autoridades continúen trabajando en la evaluación de los daños y en la puesta en marcha de medidas preventivas para evitar futuras situaciones de emergencia por las inclemencias del tiempo. La solidaridad y el apoyo de la población serán fundamentales para la recuperación de la zona y la atención a las personas afectadas por las lluvias.