El entrenador deportivo Daniel Rodríguez fue condenado a 8 años de prisión y a pagar una indemnización de 8 millones de pesos luego de inyectar una sustancia a un joven pelotero, lo que resultó en la amputación de su pierna derecha. El tribunal colegiado de Hato Mayor declaró culpable a Rodríguez por este hecho ocurrido en 2018 cuando el joven tenía 17 años. El expediente estableció que el acusado le inyectó un medicamento anabólico al adolescente con la promesa de hacerlo más fuerte para ser firmado en la pelota.
Las inyecciones con el medicamento Winstrol fueron colocadas en los glúteos de la víctima en la casa del entrenador, lo que posteriormente resultó en una trombosis bilateral y la amputación de la pierna derecha. Rodríguez fue arrestado en Hato Mayor en diciembre de 2018 y la sentencia condenatoria se basó en pruebas que demostraron que violó el Código Penal Dominicano y la Ley General de Salud. Deberá cumplir su pena en la cárcel pública de El Seibo y pagar la indemnización a la víctima.
El nombre del joven fue omitido para proteger su identidad, pero se sabe que tenía dos años en la liga de pelota que presidía Daniel Rodríguez. Cuatro meses antes de la amputación, el entrenador comenzó a inyectarle el medicamento anabólico, asegurándole que le ayudaría a ser firmado en la pelota. Después de la intervención quirúrgica para amputarle la pierna derecha, el joven estuvo en tratamiento por las secuelas de la inyección.
El Ministerio Público presentó pruebas suficientes para demostrar la culpabilidad de Rodríguez, quien violó el artículo 320 del Código Penal y los artículos 155 y 156 de la Ley General de Salud. La sentencia dictada por el tribunal incluye el pago de la indemnización a la víctima y la pena de prisión en El Seibo. Este caso ha generado indignación en la comunidad deportiva y ha puesto de manifiesto la importancia de la protección de los deportistas, especialmente los jóvenes, frente a prácticas peligrosas y abusos por parte de sus entrenadores.