El papa Francisco ha nombrado al español monseñor Alberto Ortega Martín como el nuevo nuncio apostólico en Venezuela. Ortega Martín, nacido en Madrid en 1962, había ocupado previamente el cargo de nuncio en Chile desde 2019, así como en Jordania e Irak. En Venezuela, ocupará el puesto que quedó vacante en 2021 tras la marcha de Aldo Giordano. Ortega Martín fue ordenado sacerdote en 1990 y es licenciado en Derecho Canónico. Ingresó al servicio diplomático de la Santa Sede en 1997 y ha trabajado en representaciones pontificias en Nicaragua, Sudáfrica y Líbano, así como en la Secretaría de Estado vaticana.
Durante su carrera, Ortega Martín ha ocupado diversas posiciones de importancia en la Iglesia católica. Fue nombrado arzobispo de Midila y Nuncio Apostólico en Jordania e Irak por el papa Francisco en 2015, y fue ordenado obispo en el mismo año. Su labor diplomática ha sido reconocida tanto en el ámbito nacional como internacional, demostrando su capacidad para representar a la Santa Sede en diferentes países y contextos políticos y culturales. Su nombramiento como nuncio apostólico en Venezuela es una muestra más de la confianza que el papa Francisco deposita en él para llevar a cabo esta importante labor en un país con una situación política y social compleja.
Venezuela atraviesa actualmente una crisis política y social que ha afectado a la población de manera significativa. La designación de Ortega Martín como nuncio apostólico en el país sudamericano es un gesto importante por parte de la Santa Sede para mostrar su preocupación y solidaridad con el pueblo venezolano en estos momentos difíciles. Como representante de la Iglesia católica en Venezuela, Ortega Martín tendrá la responsabilidad de promover el diálogo y la reconciliación entre las diferentes partes involucradas en el conflicto, así como de brindar apoyo espiritual y humanitario a aquellos que más lo necesitan.
La labor de un nuncio apostólico en un país como Venezuela no solo implica la representación de la Santa Sede ante las autoridades civiles y religiosas, sino también el acompañamiento de la comunidad católica y de la sociedad en general en momentos de crisis y dificultad. Ortega Martín deberá desempeñar un papel clave en la promoción de la paz y la justicia en Venezuela, así como en la defensa de los derechos humanos y la dignidad de todas las personas. Su experiencia diplomática y su compromiso con los valores evangélicos le permitirán enfrentar los desafíos que se presenten en su nuevo cargo con sabiduría y responsabilidad.
El nombramiento de Ortega Martín como nuncio apostólico en Venezuela ha sido bien recibido por la comunidad católica y por la sociedad en general, que ven en él a un líder comprometido con la justicia y la paz. Su labor pastoral y diplomática en otros países ha sido reconocida por su capacidad para trabajar en contextos difíciles y delicados. Se espera que su presencia en Venezuela contribuya a impulsar el proceso de diálogo y reconciliación en un país que tanto lo necesita, y que pueda llevar consuelo y esperanza a aquellos que sufren las consecuencias de la crisis actual. El papa Francisco ha demostrado una vez más su apoyo a la Iglesia en Venezuela al designar a Ortega Martín como su representante en este momento crucial para el país.