Dos hombres fueron condenados a 10 años de prisión por robar accesorios de vehículos y espejos retrovisores en la comunidad Los Botados, municipio Yamasá. El Tribunal Colegiado de Monte Plata impuso la pena a Juan Arturo Tapia Santana y Víctor Alfredo Encarnación Montás, quienes fueron capturados en flagrancia junto con un arma de fuego no letal. Además, se les ordenó pagar una indemnización de RD$200 mil y la destrucción del arma incautada. Los delincuentes fueron sorprendidos con una yipeta Ford blanca, cristales de retrovisores y accesorios para estos, así como un carnet de bomberos, celulares, sensores eléctricos, destornilladores y llaves.
El Ministerio Público señaló que Tapia Santana y Encarnación Montás realizaban los robos durante la madrugada y fueron capturados con evidencias contundentes que los vinculaban a la actividad delictiva. La condena de 10 años de prisión se cumplirá en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Monte Plata, mientras que la indemnización deberá ser pagada a las víctimas afectadas por el robo de accesorios de vehículos. Además, la sentencia incluye la destrucción del arma de fuego no letal encontrada en posesión de los hombres al momento de su detención.
El tribunal consideró que la gravedad del delito cometido por Tapia Santana y Encarnación Montás, así como la reincidencia de los mismos en actividades delictivas, justificaban la imposición de una pena privativa de libertad de 10 años. La comunidad de Los Botados en Yamasá se vio afectada por los robos de accesorios de vehículos, por lo que la captura y condena de los responsables representa un alivio para los residentes. El Ministerio Público continuará trabajando en la prevención y persecución de este tipo de delitos en la provincia de Monte Plata.
Los accesorios de vehículos y espejos retrovisores son objetos de valor que suelen ser blanco de robos en diferentes comunidades. La condena de 10 años de prisión impuesta a los dos hombres por sustraer estos elementos en Los Botados, Yamasá, envía un mensaje claro sobre las consecuencias de participar en actividades delictivas. La cooperación entre las autoridades locales y la comunidad fue fundamental para la captura de los responsables, demostrando que la colaboración ciudadana es esencial en la lucha contra la delincuencia.
La presencia de un arma de fuego no letal en posesión de los delincuentes durante el robo de accesorios de vehículos también destaca la peligrosidad de estas situaciones. La condena a 10 años de prisión y el pago de una indemnización de RD$200 mil reflejan la gravedad de los delitos cometidos y buscan prevenir futuras acciones delictivas similares en la zona. La destrucción del arma incautada es una medida adicional para garantizar la seguridad de la comunidad y evitar su uso en actividades criminales en el futuro. Los residentes de Los Botados, Yamasá, pueden tener mayor tranquilidad sabiendo que los responsables de los robos han sido capturados y condenados por sus acciones.