El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, y el ministro iraní de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, murieron en un accidente de helicóptero en una zona montañosa del noroeste del país. Ambos ocupantes del helicóptero siniestrado fueron encontrados sin vida en la región de Varzeqan, en Azerbaiyán Oriental, junto a otros miembros de la tripulación y autoridades locales. El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, aprobó que el vicepresidente Mohamad Mojber sea nombrado presidente interino del país y declaró cinco días de luto nacional por la muerte de Raisí. Además, el viceministro de Exteriores Ali Bagheri Kani fue nombrado como nuevo jefe de la diplomacia iraní tras la muerte de Abdolahian.
El Gobierno de Teherán aseguró que no habrá problemas en la administración del país tras el fallecimiento del presidente y que el camino lleno de honor y servicio continuará con el espíritu del ayatolá Raisí. La reunión de urgencia del gabinete iraní confirmó la asunción de Mojber como presidente interino, quien deberá coordinar la elección de un nuevo presidente en un plazo máximo de cincuenta días, según la Constitución iraní. Los restos del helicóptero en el que viajaba Raisí fueron encontrados en una zona montañosa y boscosa, con imágenes de los equipos de rescate en medio de densa niebla. A pesar del accidente, Jameneí llamó a la calma y aseguró que no habrá interrupciones en las funciones del país.
El vicepresidente primero de Irán, Mohamad Mojber, asumirá la presidencia interina después de ocupar puestos importantes en el gobierno, como la dirección del conglomerado “Ejecución de la Orden del Imán Jomeiní”, por lo que está sancionado por Estados Unidos desde 2021. El accidente del helicóptero del presidente Raisí se produjo mientras regresaba de la ciudad de Tabriz, junto con otros dos helicópteros que llegaron a su destino sin incidentes. La televisión estatal de Irán mostró restos del helicóptero en un área montañosa y boscosa de la región de Varzeqan, en Azerbaiyán Oriental, con miembros de los equipos de rescate en medio de la niebla.
Este domingo, cientos de personas se congregaron en ciudades como Mashad, Qom y Teherán para rezar por el mandatario ultraconservador y darle el último adiós. Raisí había estado inaugurando una presa en la frontera con Azerbaiyán junto con su homólogo Ilham Alíev, y destacaron la importancia del proyecto para las relaciones bilaterales entre los dos países. La Media Luna Roja y los equipos de rescate continuaron con las labores de búsqueda del helicóptero siniestrado, mientras las autoridades iraníes aseguraron que la administración del país seguirá su curso con la ayuda del pueblo iraní y la memoria del ayatolá Raisí.