Garry Conille expresó su gratitud por ser nombrado primer ministro de Haití por el Consejo Presidencial de Transición. Agradeció a las organizaciones de la sociedad civil, partidos políticos y miembros de la diáspora que propusieron su nombre. Conille, quien anteriormente ocupó el cargo de primer ministro entre 2011 y 2012, se comprometió a trabajar por un mejor futuro para todos los niños del país. Su designación se produjo luego de la renuncia de Ariel Henry y la actuación interina de Michel Patrick Boisvert en el cargo.
El camino de Garry Conille en la ONU comenzó en Haití en 1999, trabajando en el Fondo de Población de las Naciones Unidas. Posteriormente, ocupó diferentes cargos dentro de la organización, llegando a ser director regional de Unicef para América Latina y el Caribe en enero de 2023. Tras el devastador terremoto de 2010 en Haití, que dejó más de 200.000 muertos, Conille se desempeñó como jefe de gabinete de la Oficina del Enviado Especial de las Naciones Unidas para el país, coordinando esfuerzos de reconstrucción.
La designación de Fritz Belizaire como primer ministro por el grupo mayoritario en el Consejo Presidencial de Transición generó una crisis en la institución, llevando posteriormente a un proceso de recepción de candidaturas para el cargo. Finalmente, Garry Conille fue seleccionado para ocupar el puesto de forma interina. La situación en Haití es crítica, con una grave crisis social, política y económica, además de una creciente violencia provocada por bandas armadas que han causado miles de víctimas el año pasado y que se ha intensificado recientemente.
La trayectoria de Conille en el ámbito de la salud, siendo médico de profesión, se entrelaza con su labor política y humanitaria en Haití. Su compromiso con el bienestar de los niños y las nuevas generaciones del país resuena en su mensaje al asumir el cargo de primer ministro. La situación en la nación caribeña requiere de liderazgo y acciones concretas para abordar los desafíos que enfrenta y buscar soluciones a la crisis que afecta a la población haitiana.
La experiencia de Garry Conille en la ONU y su participación en la coordinación de esfuerzos de reconstrucción tras el terremoto de 2010 lo posicionan como un líder con conocimiento y habilidades para abordar las complejas problemáticas que enfrenta Haití. Su nombramiento como primer ministro se da en un contexto de crisis y desafíos para el país, pero su compromiso con la mejora de las condiciones de vida de la población y su enfoque en la infancia son aspectos que resaltan en su nueva responsabilidad.
En medio de la compleja realidad haitiana, Garry Conille asume su nuevo rol con determinación y la voluntad de contribuir al avance y la estabilidad del país. Su llamado a trabajar por un futuro mejor para todos los niños de Haití refleja su compromiso con el desarrollo y el bienestar de las generaciones presentes y futuras. Conille enfrenta un desafío importante al liderar el gobierno en un momento crítico para la nación, pero su experiencia y dedicación pueden ser clave para impulsar cambios positivos y abordar las crisis que enfrenta Haití.
