Corea del Norte lanzó un misil balístico no identificado en dirección al Mar de Japón, según informó el Estado Mayor Conjunto surcoreano. El Ejército surcoreano no proporcionó detalles adicionales sobre este nuevo test de Corea del Norte, que tuvo lugar poco después de que otro cohete espacial lanzado por Pionyang fallara en su intento de poner en órbita un satélite espía debido a problemas en el motor. Japón también reportó la caída del proyectil en aguas del Mar de Japón, aparentemente fuera de su zona económica exclusiva.
En días anteriores, Corea del Norte había notificado a Japón sobre su intención de lanzar un nuevo satélite espía, ofreciendo una ventana de lanzamiento entre el día del aviso y el próximo 3 de junio. El lanzamiento del vehículo espacial tuvo lugar desde la base espacial de Sohae y, apenas dos minutos después, el Ejército surcoreano detectó el proyectil como un grupo de fragmentos sobre el litoral norcoreano. Este nuevo fracaso se suma a otros intentos fallidos en el programa espacial de Corea del Norte en años anteriores.
En un discurso publicado recientemente, Kim Jong-un, líder de Corea del Norte, explicó que el lanzamiento fallido se debió a problemas en los motores de la primera fase del cohete, lo que activó el sistema de autodestrucción. Destacó la importancia de contar con satélites de reconocimiento militar para fortalecer la disuasión de autodefensa del país. Este nuevo test de misil balístico añade tensión a la ya complicada situación en la península coreana y genera preocupación en la comunidad internacional.
Corea del Sur condenó enérgicamente el lanzamiento del misil balístico por parte de Corea del Norte y expresó su preocupación por la escalada de tensiones en la región. El presidente surcoreano instó a Pionyang a cesar sus provocaciones y buscar una solución diplomática a los problemas pendientes. Corea del Norte continúa desafiando las sanciones internacionales y las advertencias de la comunidad internacional al llevar a cabo pruebas de este tipo, lo que agrava la inestabilidad en la región.
La comunidad internacional ha reaccionado con preocupación ante el nuevo lanzamiento de misil por parte de Corea del Norte, instando al país a respetar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y a abstenerse de llevar a cabo acciones que puedan aumentar las tensiones en la región. Se espera que este último incidente genere discusiones en el ámbito diplomático y que se busquen nuevas formas de abordar la crisis en la península coreana. La cooperación entre los países vecinos y otros actores internacionales será crucial para encontrar una solución pacífica a este conflicto en curso.