Jessica Pereira pidió disculpas a la audiencia y a los ejecutivos de RCC Media luego de que un integrante de su elenco y un invitado se enfrentaran a golpes durante la transmisión en vivo de su programa radial "Jessica en punto". Con lágrimas en los ojos, declaró que no supo manejar la situación y reconoció que en el mundo del espectáculo, enfrentar críticas y adversidades es parte del proceso. Agradeció a sus compañeros de La Bakana FM por su apoyo, pero El Boli expresó que si dependiera de él, Jessica no estaría al aire, ya que considera que su comportamiento es criticable. A pesar de que el video original no fue publicado en las plataformas oficiales, fue filtrado en redes sociales.
Además, Jessica pidió disculpas a don Antonio Espaillat, a doña Mons y a toda la familia de La Bakana y de RCC Media por lo sucedido en sus instalaciones. Explicó que los involucrados en la agresión se encuentran bien, especialmente "Caito", a quien llevó a su casa después de ser golpeado en la cabeza con un bate por "Shakata" durante una entrevista en el programa. Aunque lamentó que la violencia se haya manifestado en su emisora, se comprometió a trabajar para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir.
Las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar, generando debate y opiniones divididas sobre el incidente en el programa radial. Mientras algunos usuarios condenaron la violencia y pidieron una disculpa pública más enfática por parte de Jessica Pereira, otros defendieron su integridad y expresaron su comprensión ante la complejidad de manejar situaciones conflictivas en un medio de comunicación en vivo. La controversia aumentó cuando se filtraron imágenes de la pelea entre los integrantes del elenco, lo que alimentó la polémica en línea.
La comunicadora venezolana recibió apoyo y solidaridad de algunos colegas y amigos de la industria del entretenimiento, quienes manifestaron su respaldo a Jessica en estos momentos difíciles. A pesar de las críticas y la presión mediática, Pereira se mantuvo firme en su posición de asumir la responsabilidad por lo ocurrido y ofrecer disculpas sinceras a todos los afectados por el incidente en su programa. Agradeció las muestras de cariño y comprensión de sus seguidores, quienes han estado presentes en todo momento, brindándole su apoyo incondicional.
En medio de la controversia y la repercusión mediática del incidente, Jessica Pereira se comprometió a reflexionar sobre su papel como comunicadora y a mejorar sus habilidades para manejar situaciones conflictivas en su programa radial. Reconoció que la violencia no tiene cabida en ningún entorno, y se comprometió a trabajar en la prevención de conflictos y en la promoción de un ambiente de respeto y cordialidad en su programa. La comunidad radial espera que este episodio sirva como un punto de inflexión en la carrera de Jessica, impulsándola a crecer y aprender de esta experiencia para mejorar en el futuro.