El arzobispo metropolitano de la arquidiócesis afirmó que los funcionarios públicos y los partidos políticos deben jugar un papel fundamental en la sociedad dominicana y la justicia debe actuar cuando se cometen acciones ilícitas. Monseñor Rodríguez enfatizó que en la política no se debe buscar lucrarse o robar, ya que las funciones están establecidas en la Constitución y los estatutos correspondientes. Hizo hincapié en que aquellos que cometen actos de corrupción lo hacen por voluntad propia y no por falta de conocimiento. Esto surgió tras el caso de la diputada condenada por lavado de activos.
Durante la celebración de Corpus Christi en el estadio Cibao, el arzobispo habló sobre el caso de la diputada condenada, señalando que pudo haberse visto envuelta en un sistema corrupto del que quizás quiso salir, pero tardíamente. Expresó que el pueblo no elige a sus representantes para cometer delitos y solicitó que casos como el de la legisladora no se repitan con otros funcionarios elegidos en las elecciones recientes. Además, mencionó la importancia de que la justicia actúe y se haga cumplir en estos casos para evitar la impunidad y la corrupción en la sociedad dominicana.
En relación a la situación en Haití, el arzobispo expresó su esperanza de que con la designación del nuevo ministro Garry Conille y el apoyo de la fuerza multinacional liderada por Kenia, el país vecino pueda alcanzar la paz y la estabilidad tan anheladas. Destacó que Haití es un país con un pueblo trabajador, pero afectado por la presencia de bandas criminales que generan inseguridad y caos. Monseñor Rodríguez lamentó los ataques de estas bandas a lugares como centros educativos y hospitales, afectando a personas vulnerables.
Durante la misa, el arzobispo instó a la población a practicar la solidaridad y la empatía con los más necesitados, siguiendo el ejemplo de Jesús. Hizo un llamado a trabajar por una sociedad más justa y criticó a aquellos que promueven la violencia y luego buscan la paz de forma hipócrita. Expresó su deseo de que la misión en Haití logre restablecer la paz y la tranquilidad en el país, permitiendo que el pueblo haitiano pueda vivir en armonía y seguridad. Enfatizó la importancia de erradicar la influencia de las bandas criminales en la sociedad haitiana para lograr un progreso real.
El arzobispo destacó la importancia de que los líderes políticos y los funcionarios públicos actúen de manera ética y transparente en beneficio de la sociedad, evitando caer en la corrupción y el abuso de poder. Subrayó que la política debe ser un medio para servir al pueblo y trabajar por el bien común, y no para beneficio personal o el enriquecimiento ilícito. Instó a que se establezcan mecanismos efectivos para combatir y prevenir la corrupción en todas sus formas, garantizando que aquellos que cometen actos ilícitos sean llevados ante la justicia y que se respeten los principios de transparencia y rendición de cuentas en la gestión pública.
En conclusión, el arzobispo Héctor Rafael Rodríguez hizo un llamado a la honestidad, la justicia y la solidaridad en la sociedad dominicana y en la región, instando a los líderes políticos y a la población en general a trabajar juntos por un futuro mejor y más justo para todos. Destacó la importancia de erradicar la corrupción y la impunidad, promoviendo valores éticos y morales en todos los ámbitos de la vida pública y privada. Su mensaje resuena como un llamado a la reflexión y la acción para construir sociedades más transparentes, inclusivas y justas en el Caribe y en todo el mundo.