El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presentó una nueva orden migratoria para restringir el asilo como contrapunto a las políticas de deportación masiva prometidas por Donald Trump. En su discurso en la Casa Blanca, Biden aseguró que nunca "demonizará" a los migrantes y prometió trabajar con México como un "socio igualitario". Destacó su colaboración con México y mencionó haber hablado con la próxima gobernadora Claudia Sheinbaum.
Biden mencionó que su nueva orden ejecutiva entrará en vigor de inmediato y permitirá a las autoridades estadounidenses deportar a quienes no cumplan ciertos estándares de asilo cuando se exceda la cifra de 2,500 detenciones diarias en la frontera. También se defendió de las críticas recibidas por parte de legisladores hispanos del Partido Demócrata y afirmó que la inmigración ha sido un salvavidas en América. Destacó que no separará a familias en la frontera ni prohibirá la entrada al país por creencias religiosas.
La orden de Biden llega en un momento crucial, a menos de seis meses de las elecciones, donde la gestión de la migración se ha convertido en un tema central para los votantes, superando a la economía y la inflación. La campaña de Trump arremetió contra la medida de Biden, calificándola de "amnistía" y criticando la ampliación de la elegibilidad para el plan de asilo. Biden buscó distinguirse de Trump y criticó la decisión republicana de bloquear un proyecto de ley bipartidista que incluía algunas de las disposiciones de su orden ejecutiva.
En su discurso, Biden se comprometió a seguir colaborando con México como un socio igualitario y aseguró que nunca demonizará a los inmigrantes. Hizo referencia a políticas implementadas por Trump, como separar familias en la frontera o vetar la entrada a EE.UU. de nacionales de países de mayoría musulmana. Destacó su compromiso con la humanidad y la dignidad de los migrantes, en contraste con las políticas más duras de su predecesor.
La relación entre Estados Unidos y México ha sido un tema central en la política migratoria de Biden, quien ha buscado trabajar de manera colaborativa con el país vecino. Su nueva orden ejecutiva busca establecer un equilibrio entre la seguridad en la frontera y el respeto por los derechos de los migrantes. Biden ha prometido seguir trabajando en estrecha colaboración con México y se ha comprometido a construir una relación fuerte y de respeto mutuo con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.