Al menos 20 personas fueron asesinadas por miembros de la coalición de bandas Vivre Ensemble (Vivir Juntos) en la Subcomisaría de Policía de la comuna de Gressier, sur de Puerto Príncipe. Jean Vladimir Bertrand, líder de la comuna de Gressier, confirmó la información y pidió una intervención urgente de las fuerzas del orden para limitar los daños. El asalto y posterior demolición de la subcomisaría fueron realizados por bandidos de la coalición dirigida por Jimmy Cherizier, conocido como 'Barbecue'. La población vive aterrorizada desde el asalto, que es la segunda irrupción en Gressier en menos de tres meses.
A pesar de la presencia de tropas kenianas en el país, las bandas armadas continúan sembrando el terror en la zona. Los policías asignados a la subcomisaría huyeron de los bandidos armados, quienes grabaron su ataque en un video que difunden en redes sociales para demostrar su poder. Gressier está actualmente bajo el control de las bandas armadas, lo que ha provocado la huida de cientos de habitantes a ciudades vecinas del sur de Puerto Príncipe.
Las bandas armadas en Haití han demostrado su poderío al asaltar la subcomisaría de Gressier a pesar de la presencia de la misión multinacional de apoyo a la seguridad autorizada por la ONU. En un video, un jefe de banda llamado Ti Bébé Bougoy se burla de la fuerza multinacional y desafía a los kenianos a enfrentarse a ellos. A pesar de la llegada del contingente de policías kenianos al país, las bandas continúan controlando la situación y amenazando a la población.
La situación en Gressier es crítica, con las bandas armadas cometiendo asesinatos y robos en la población. La presencia de tropas kenianas no ha logrado contener la violencia desatada por las pandillas, lo que ha llevado a la huida de cientos de habitantes de la zona. La situación de inseguridad en Haití es alarmante, y las autoridades locales piden una intervención urgente para restablecer el orden y proteger a la población indefensa.
La impunidad con la que operan las bandas armadas en Haití es evidente en el asalto a la subcomisaría de Gressier y en los ataques coordinados contra la población. La falta de control sobre la situación por parte de las autoridades locales y la presencia de la misión multinacional de apoyo a la seguridad parecen no ser suficientes para detener la violencia. Es necesario un esfuerzo conjunto y coordinado para hacer frente a esta grave crisis de seguridad que afecta a la población haitiana.
La comunidad internacional debe prestar atención a la situación en Haití y brindar apoyo para resolver la crisis de seguridad que enfrenta el país. Las bandas armadas han demostrado su poder y su capacidad para sembrar el terror en la población, lo que requiere una respuesta rápida y efectiva de las autoridades locales y de la comunidad internacional. Es fundamental proteger a la población civil y restablecer el orden en Haití para evitar que la violencia continúe cobrando vidas y afectando la estabilidad del país.