El huracán Beryl causó graves daños en el sur de República Dominicana, especialmente en el Autopista 30 de Mayo en el Distrito Nacional, la Avenida España, el Malecón en Santo Domingo Este y la Autopista Las Américas. En estas vías, las olas del mar derribaron paredes, arrancaron partes de la capa asfáltica y lanzaron escombros a las viviendas cercanas, como en los residenciales Costa Verde y Costa Azul. La limpieza y reconstrucción de estas zonas fue trabajosa y se vio reflejada en el cierre de tramos de carreteras y la presencia de obreros y maquinaria del Ministerio de Obras Públicas.
En la playa del litoral marino, se debió cerrar parques y zonas de recreación para su limpieza y remozamiento, ya que el oleaje seguía lanzando rocas de manera esporádica. En el area de la curva donde se encuentra el Obelisco Hembra, una parte de la acera fue arrancada y una gran cantidad de desechos sólidos fueron recolectados por miembros de la Alcaldía del Distrito, encabezados por Elizabeth Mateo, Junior Castillo, José Aníbal Sanz y Ana González. Según Castillo, la mayoría de los desechos no son del Distrito Nacional, sino que son arrastrados por el río desde el Gran Santo Domingo.
En la Avenida España en Santo Domingo Este, se observó que esta vía también sufrió daños, con escombros lanzados por el mar en diferentes tramos. El alcalde Dío Astacio fue visto trabajando con una brigada en las labores de limpieza, junto a varios obreros y equipo pesado. En la Autopista Las Américas, la estación de la DIGESETT fue una de las áreas más afectadas por las olas y el viento del huracán Beryl. La fuerza de la naturaleza dejó un claro impacto en estas zonas, que requirieron de labores intensivas de limpieza y reconstrucción.
A lo largo del trayecto del huracán Beryl, se pudo observar el esfuerzo conjunto de diversas entidades y autoridades para mitigar los daños causados por el fenómeno. Los trabajos de limpieza y reconstrucción fueron realizados por el Ministerio de Obras Públicas, la Alcaldía del Distrito Nacional y otras instituciones, con la participación de obreros, maquinaria pesada y equipos de limpieza. La colaboración y coordinación entre estos actores fue fundamental para restaurar la normalidad en las zonas afectadas y garantizar la seguridad de la población.
A pesar de los destrozos causados por el huracán Beryl, la respuesta ante la emergencia fue rápida y efectiva, con acciones inmediatas para limpiar y reconstruir las áreas afectadas. La presencia de autoridades locales y personal de diferentes instituciones fue fundamental para coordinar las labores de limpieza y garantizar la seguridad de los residentes. A medida que las vías y zonas afectadas fueron siendo rehabilitadas, se pudo observar el esfuerzo y dedicación de todos los involucrados en la recuperación de las zonas afectadas por el paso del huracán Beryl en el sur de República Dominicana.