El Centro de Operaciones de Emergencia (COE) ha mantenido en alerta a 24 provincias en la República Dominicana debido a las fuertes lluvias que han provocado el anegamiento de 118 viviendas y desplazamiento de 590 personas. También se han visto afectados seis acueductos, dejando a 61,256 usuarios sin servicio. Existe la posibilidad de desbordamiento de ríos, arroyos y cañadas, lo que podría originar inundaciones tanto en zonas rurales como urbanas, así como deslizamientos de tierra.
La Oficina Nacional de Meteorología ha pronosticado la continuidad de aguaceros, truenos y vientos en las regiones noroeste, norte y sur del país. Sin embargo, se espera que una masa de aire con menor contenido de humedad y la presencia de polvo proveniente del desierto del Sahara contribuyan a una disminución de las lluvias en algunos puntos de la nación.
En este contexto de advertencia, se destaca que la alerta roja se ha emitido para Santo Domingo y el Distrito Nacional, exhortando a la población a seguir las recomendaciones de los organismos de socorro y tomar medidas que prevengan posibles pérdidas humanas y daños materiales. Por otro lado, varias provincias se encuentran en alerta amarilla y verde, indicando distintos niveles de riesgo ante las condiciones climáticas adversas.
Se ha informado también sobre los daños provocados por las lluvias en diferentes sectores de Santo Domingo Este, donde cinco viviendas resultaron anegadas en áreas como Hainamosa, Residencial Iris Doris, Alma Rosa y la avenida Charles de Gaulle. En el Distrito Nacional, se reportaron seis casas inundadas en La Zurza, mientras que en San Antonio de Guerra se ha desbordado la cañada Arroyo Manzano, afectando a unas 20 viviendas en Los Girasoles.
Además de las viviendas anegadas y los desplazamientos de personas, se ha alertado sobre la posibilidad de fuertes oleajes y ráfagas de viento en la costa caribeña, lo que representa un riesgo para embarcaciones frágiles, pequeñas y medianas en la zona comprendida entre cabo Beata y Barahona. Se aconseja precaución y evitar la navegación mar adentro en estas condiciones climáticas. Se espera que las autoridades y la población tomen las medidas necesarias para prevenir mayores daños y garantizar la seguridad de todos.