Según diversos estudios de la Larner College of Medicine de la Universidad de Vermont y la Universidad de Harvard, el consumo regular de chiles picantes podría estar vinculado a una vida más larga y a tasas más bajas de mortalidad. Investigadores encontraron una reducción del 13% en la mortalidad total, especialmente en muertes por enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares, entre quienes incluyen estos alimentos en su dieta.
La capsaicina, el componente principal de los chiles picantes, se destaca como posible mecanismo detrás de estos beneficios, ya que puede prevenir la obesidad, modular el flujo sanguíneo coronario y tener propiedades antimicrobianas. Además, el consumo de chiles picantes podría impactar de manera indirecta en la microbiota intestinal del cuerpo. Estos hallazgos se presentaron en la reunión de la American Heart Association en 2020 y aunque son preliminares, respaldan la idea de que la capsaicina puede ayudar a amortiguar la inflamación y otros procesos perjudiciales para la salud cardiovascular.
Un estudio realizado por la Universidad de Harvard y publicado en el Journal of the American College of Cardiology analizó las dietas y registros de salud de más de 22,000 personas en el sur de Italia. Los resultados mostraron que aquellos que consumían chiles picantes más de cuatro veces por semana tenían un riesgo aproximadamente un tercio menor de morir por enfermedades cardíacas en comparación con quienes rara vez o nunca los consumían. Estos resultados añaden peso a la idea de que la capsaicina puede tener efectos beneficiosos para la salud cardiovascular.
El análisis de múltiples estudios observacionales sugiere que quienes consumen chiles picantes regularmente presentan tasas más bajas de mortalidad por enfermedades cardiovasculares, cáncer y por cualquier causa en general. Sin embargo, los investigadores advierten que estos beneficios no están directamente relacionados con el consumo de chiles picantes, ya que podría haber otros factores dietéticos y de estilo de vida involucrados. Se sugiere que se necesitan más investigaciones para determinar las pautas exactas de consumo que maximizarían los beneficios para la salud.
A pesar de los posibles beneficios del consumo de chiles picantes, algunos estudios previos han asociado su consumo con el cáncer de vesícula biliar, aunque esta asociación no está claramente establecida. Las variaciones en los tipos y cantidades de chiles consumidos en los estudios también sugieren que se requiere más investigación en este ámbito. Además, se destaca la importancia de combinar el consumo de chiles picantes con un estilo de vida saludable en general, incluyendo una dieta equilibrada, ejercicio regular y mantener un peso adecuado.
En resumen, diversos estudios sugieren que el consumo regular de chiles picantes podría estar asociado a una reducción en la mortalidad y beneficios para la salud cardiovascular. La capsaicina, componente principal de los chiles picantes, se destaca por sus posibles efectos benéficos en la prevención de la obesidad y la modulación del flujo sanguíneo. A pesar de los beneficios potenciales, se necesita más investigación para determinar los efectos exactos del consumo de chiles picantes y se recomienda combinar este consumo con un estilo de vida saludable en general.