El duelo infantil es un proceso que cada niño enfrentará a su manera, ya sea por la pérdida de un abuelo, abuela, padre, madre u otra persona importante en su vida. La psicóloga clínica Nisaly Brito Ramírez explica que la muerte de un padre o madre es una de las experiencias más difíciles para un niño, ya que altera su desarrollo vital. El duelo infantil se manifiesta de diferentes formas, dependiendo de la naturaleza del dolor experimentado por el niño.
Según Brito Ramírez, desde la infancia los seres humanos aprenden a enfrentar el dolor y la pérdida a través de experiencias como la muerte de mascotas, mudanzas o cambios significativos en su vida. Los niños expresan su dolor de maneras diversas, como pérdida de apetito, sensibilidad, irritabilidad o desmotivación. En el caso de la muerte de uno de los padres, el duelo puede ser especialmente profundo y complejo, dependiendo de las circunstancias en que ocurra la pérdida.
La ausencia de uno de los padres también puede provocar un profundo dolor en los niños, ya sea por privación de libertad, distancia o desapego. Es importante reconocer y aceptar las emociones de los niños en estos momentos difíciles, brindándoles apoyo y acompañamiento en su proceso de duelo. Comunicar la muerte de uno de los padres en el momento adecuado, ofrecerles ayuda profesional y entender que cada niño enfrentará el duelo de forma única son aspectos fundamentales para ayudar a los niños a superar esta dolorosa experiencia.
La psicóloga clínica destaca la importancia de reconocer que existen diferentes tipos de duelos en los niños, y cada uno requiere un enfoque específico. Es fundamental estar atento a las señales que los niños pueden manifestar durante su duelo, como cambios en su comportamiento, emociones intensas o problemas para expresar lo que sienten. Ofrecerles un espacio seguro para hablar sobre sus emociones, brindarles apoyo emocional y buscar ayuda profesional si es necesario son acciones clave para acompañar a los niños en su proceso de duelo.
El duelo infantil es un proceso natural y necesario para que los niños puedan procesar y superar la pérdida de un ser querido. Cada niño enfrentará el duelo a su manera y es importante respetar su proceso individual. Brindarles amor, comprensión y apoyo en este difícil momento puede ayudarles a sobrellevar el dolor y a aprender a manejar sus emociones. Con el tiempo y el apoyo adecuado, los niños podrán sanar y seguir adelante a pesar de la pérdida que han experimentado.
