La jugadora de voleibol Bethania de la Cruz se retira de la selección dominicana con la satisfacción de haber superado sus expectativas. Después de participar en los Juegos Olímpicos de París 2024, expresó su gratitud y orgullo por representar a su país y llevar el número 18. Luego de una exitosa carrera de dos décadas y varios premios, incluyendo una medalla de oro, se despidió con un emotivo mensaje en Instagram, agradeciendo a sus familiares, compañeras de equipo y fanáticos por su apoyo y motivación.
Bethania de la Cruz se destacó en la Liga de los Estados Unidos "Athletes Unlimited", donde ganó el premio a Jugador Más Valioso y Mejor Anotador en abril de 2022. En su despedida, afirmó que dio lo mejor de sí misma y expresó su agradecimiento hacia sus compañeras de equipo, a quienes aplaudió y bendijo por su valentía. La jugadora se mostró agradecida por los momentos "irrepetibles" que vivió en su carrera y reconoció la importancia del apoyo de sus fans y de su país.
La jugadora dominicana agradeció a sus seguidores por haberla apoyado a lo largo de su carrera y por estar presentes en cada logro. Reconoció la importancia de representar a la República Dominicana en los más altos niveles del voleibol internacional y expresó su gratitud por haber tenido la oportunidad de llevar el nombre de su país a tierras lejanas. Con un mensaje de amor y agradecimiento, Bethania de la Cruz se despidió de su carrera deportiva, dejando un legado de esfuerzo, pasión y dedicación en el voleibol femenino.
La jugadora cerró su discurso resaltando la importancia del apoyo de su familia, quienes siempre estuvieron a su lado y la motivaron a seguir adelante. También valoró la experiencia de haber compartido momentos únicos con sus compañeras de equipo, a quienes reconoció como valientes guerreras. Con un mensaje de buenos deseos para su futuro, Bethania de la Cruz agradeció a todos los que formaron parte de su trayectoria deportiva y les deseó mucho éxito en sus próximos desafíos.
Bethania de la Cruz se despide de la selección de voleibol femenino de la República Dominicana con la satisfacción de haber cumplido su sueño de ser reconocida a nivel mundial. Después de una exitosa carrera que incluyó una medalla de oro, la jugadora se retira con la cabeza en alto, agradecida por todas las oportunidades que el deporte le brindó. Su legado en el voleibol dominicano queda marcado por su entrega, dedicación y pasión por el juego, dejando un ejemplo a seguir para las generaciones futuras.