El martes 13 es una fecha temida y llena de supersticiones en diversas culturas a lo largo de la historia. Su asociación con la mala suerte se remonta a antiguas creencias de la Biblia y la mitología romana. En la narración de la Última Cena, Judas Iscariote es vinculado al número 13, siendo el decimotercer invitado en la cena. Además, en la tradición romana, el dios de la guerra, Marte, simboliza la destrucción, lo que llevó a evitar eventos importantes en días dedicados a él, como el martes. Esta creencia se intensifica cuando el martes coincide con el día 13, considerado doblemente negativo.
La superstición del martes 13 se enriquece con matices de otras tradiciones, como la Kabbalah judía que menciona 13 espíritus malignos y el capítulo 13 del Apocalipsis que narra la llegada del anticristo. Además, referencias históricas como la caída de Constantinopla en 1453, erróneamente asociada con un martes 13, alimentan esta superstición. Otro episodio que se suma a la creencia es la ocupación de Játiva por los musulmanes un martes 13 de junio de 1276, según relata Marcos Rafael Blanco Belmonte.
A diferencia del martes 13, el viernes 13 tiene raíces en la tradición cristiana. La crucifixión de Jesucristo en un viernes y la caída de los Caballeros Templarios en un viernes 13 contribuyeron a su reputación de día de mala suerte. En la cultura occidental, especialmente en Europa y Estados Unidos, el viernes 13 se ve con desconfianza. La popularidad de películas de terror como Friday the 13th ha intensificado esta percepción negativa.
El martes 13 se asocia principalmente con la influencia de la mitología romana y la Biblia, debido a la reputación negativa de Marte, dios de la guerra. Esta creencia ha perdurado en muchas comunidades hispanohablantes, donde se evita tomar decisiones importantes en ese día. Por otro lado, el viernes 13 tiene su origen en episodios históricos cristianos que contribuyeron a su reputación negativa en la cultura occidental. La diferencia entre ambos días radica en sus orígenes y en la forma en que han sido percibidos a lo largo de la historia en diferentes culturas.
En resumen, el martes 13 y el viernes 13 son fechas cargadas de superstición en diversas culturas, cada una con sus propias razones detrás de la mala suerte asociada. Mientras que el martes 13 se relaciona con la mitología romana y la Biblia, el viernes 13 tiene sus raíces en la tradición cristiana. Ambos días han generado temor y supersticiones a lo largo del tiempo, intensificados por referencias históricas y culturales específicas que refuerzan su reputación negativa. A pesar de las diferencias en sus orígenes, ambas fechas continúan siendo vistas con desconfianza en muchas partes del mundo.