El turismo en República Dominicana está experimentando un gran desarrollo, pero se necesita un plan estratégico para garantizar la sostenibilidad del sector. Directivos del Circuito de Turismo Sostenible (Circuito Samaná) destacan la importancia de que el crecimiento del turismo se base en el bienestar de los dominicanos y en un desarrollo planificado y sostenible. Actualmente, no existe una estrategia de desarrollo para el turismo en el país, lo que ha llevado a problemas como la falta de agua potable en algunas zonas turísticas debido a la deforestación y la mala infraestructura de distribución.
El suministro de agua potable es uno de los principales problemas que enfrenta el sector turístico en República Dominicana, especialmente en zonas como Bávaro, donde los hoteles deben abastecerse de agua a través de pozos debido a la falta de un acueducto. La falta de planificación y de estudios de impacto económico y ambiental ha llevado a situaciones preocupantes, como la salinización de las aguas subterráneas en algunas zonas turísticas. Además, la falta de recursos humanos capacitados para responder a la demanda de servicios turísticos es otro desafío que enfrenta el sector.
Los directivos del Circuito Samaná advierten sobre la importancia de considerar la capacidad de carga de un territorio antes de impulsar un desarrollo turístico acelerado, ya que esto puede llevar a problemas irreversibles a medio y largo plazo. Destacan la necesidad de aprender de las experiencias negativas vividas en otros polos turísticos del país, como Puerto Plata y Juan Dolio, donde un crecimiento descontrolado ha generado problemas ambientales y sociales. En este sentido, subrayan la importancia de desarrollar una estrategia de desarrollo turístico que considere de forma integral los aspectos económicos, sociales y ambientales.
El Circuito Samaná es una iniciativa que busca promover la sostenibilidad en el sector turístico de la península de Samaná, en República Dominicana. Más de 100 empresas locales están comprometidas con este proyecto, que tiene como objetivo principal demostrar que el turismo puede ser una fuerza positiva para el desarrollo económico y social, siempre y cuando se base en principios de sostenibilidad y respeto al medio ambiente. Los directivos del Circuito Samaná abogan por un turismo que beneficie a la población local, impulse el desarrollo de las comunidades y proteja los recursos naturales de la región.
En resumen, la falta de un plan estratégico de desarrollo turístico en República Dominicana está generando problemas como la escasez de agua potable en zonas turísticas, la falta de recursos humanos capacitados y la falta de planificación en la expansión de la infraestructura hotelera. Los directivos del Circuito Samaná enfatizan la importancia de impulsar un turismo sostenible y planificado que beneficie a la población local, proteja el medio ambiente y promueva el desarrollo económico de la región. Es necesario aprender de las experiencias pasadas y evitar repetir los errores del pasado en el desarrollo turístico del país.