La Organización Mundial de la Salud declaró la mpox como una emergencia de salud pública de interés internacional el 14 de agosto de 2024, con más de 15,600 casos y más de 530 muertes reportadas en la República Democrática del Congo y países vecinos de África. La enfermedad, antes conocida como viruela del mono, tuvo un brote global entre 2022 y 2023. El virus causante, perteneciente a la familia Poxviridae, es similar al de la viruela y se ha detectado principalmente en África central y occidental, siendo la República Democrática del Congo el país con más casos.
La transmisión del virus puede ocurrir a través del contacto con personas o animales infectados, así como con superficies contaminadas. Una vez que el virus entra en el cuerpo, comienza a replicarse y a propagarse a través de la sangre, lo que lleva a la aparición de síntomas como fiebre, dolor de cabeza y erupciones cutáneas similares a las de la viruela. Aunque generalmente la mpox es una enfermedad leve, una variante de la enfermedad puede tener una tasa de mortalidad del 10%, aunque la que circula actualmente es menos letal, con una tasa de mortalidad inferior al 1%.
El tratamiento de la mpox se centra en aliviar los síntomas, ya que no hay cura disponible. Sin embargo, se ha demostrado que la vacuna contra la viruela puede prevenir las infecciones por mpox y reducir la gravedad de los síntomas. La vacunación después de la exposición al virus también puede disminuir las probabilidades de una enfermedad grave. La vacuna Imvamune o Imvanex está autorizada en Estados Unidos para prevenir la mpox y la viruela, y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan la vacunación contra la viruela en personas expuestas o en riesgo de exposición.
El virus de la viruela del simio, causante de la mpox, se ha aislado en animales africanos, aunque se desconoce completamente el reservorio animal del virus. La enfermedad ha sido notificada en varios países de África central y occidental, con casos relacionados con viajes internacionales o importación de animales. Los primeros casos de mpox en Estados Unidos se reportaron en 2003, vinculados a un envío de animales de Ghana, y desde entonces ha habido otros casos asociados a viajes. A los funcionarios de salud les preocupa la posible propagación comunitaria del virus y aún se están investigando las vías de transmisión.
El nombre "viruela del simio" se originó en los primeros casos documentados de la enfermedad en monos en 1958, aunque no se ha demostrado que los monos sean portadores principales del virus. Los síntomas de la mpox suelen aparecer una o dos semanas después de la infección, con erupciones cutáneas, fiebre y malestar general. Aunque la enfermedad suele ser leve, una variante más mortal puede causar la muerte en el 10% de los casos. Los investigadores continúan estudiando el mpox y su transmisión para encontrar formas de prevenir y tratar la enfermedad.