El senador de origen cubano Bob Menéndez, quien una vez fue considerado el latino más influyente en la política estadounidense, ha renunciado después de ser declarado culpable de 16 cargos de corrupción y soborno. Su carrera política de casi 50 años culmina este 20 de agosto, poniendo fin a su papel como destacada figura demócrata y líder de la comunidad hispana en Nueva Jersey. Menéndez fue el primer latino en presidir el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, hecho que constituyó un orgullo para su familia de inmigrantes cubanos en EE.UU.
Nacido en Nueva York, Menéndez se graduó y obtuvo un doctorado en Derecho en la Rutgers School of Law, destacando sus orígenes humildes como hijo de inmigrantes. A lo largo de su carrera política, Menéndez se destacó como defensor de los derechos de la comunidad latina, abogando por causas sociales y oponiéndose firmemente al régimen castrista en Cuba. También fue un firme defensor de los inmigrantes, liderando esfuerzos para una reforma migratoria en el Congreso, aunque sin éxito.
Menéndez respaldó programas como DACA y se opuso a los intentos de Donald Trump de terminar con ellos, mostrando también su rechazo al Gobierno cubano y promulgando leyes para limitar el acceso de países como Nicaragua a préstamos extranjeros. Sin embargo, su reputación se vio empañada cuando fue encontrado culpable de soborno y corrupción en un caso relacionado con Egipto y Catar, incluyendo regalos de lujo para su esposa y lingotes de oro a cambio de favores políticos.
En medio de acusaciones previas de corrupción en 2015, Menéndez se mantuvo políticamente activo y enfrentó un nuevo juicio en 2020, renunciando al Partido Demócrata y lanzando una campaña como candidato independiente antes de retirarse. Su renuncia ha llevado al gobernador de Nueva Jersey a nombrar un reemplazo temporal en el Senado, mientras se espera la elección de un nuevo senador en noviembre. Menéndez planea apelar su condena, argumentando falta de evidencia sólida que pruebe su culpabilidad.
El oscuro final de la carrera política de Menéndez podría tener implicaciones para su hijo, el representante a la Cámara Rob Menéndez, quien busca la reelección en noviembre. A pesar de su legado como líder latino en la política estadounidense, la condena por corrupción ha marcado el final de una era para Bob Menéndez, dejando un vacío en la representación hispana en el Congreso.