El Aeropuerto Internacional de Tocumen, el principal aeropuerto de Panamá y un importante centro de conexión regional, ha informado que la empresa Odebrecht ha sido condenada a pagarle más de 30 millones de dólares en un laudo arbitral por incumplimiento de contrato. Esta condena se debe a los graves incumplimientos por parte de Odebrecht en la ejecución del programa de expansión de la Terminal 2 del aeropuerto, lo que llevó a la rescisión del contrato en septiembre de 2021.
El laudo arbitral dictaminó que Odebrecht debe pagar 29.100.000 dólares por lucro cesante y 1.661.730,31 dólares por daños y perjuicios, lo que suma un total de 30.761.730,31 dólares a favor de Tocumen. La disputa comenzó debido a los retrasos en la entrega de la expansión de la Terminal 2, que originalmente estaba programada para ser completada a finales de 2017. La constructora brasileña incurrió en ocho adendas y continuos incumplimientos, lo que generó gastos extraordinarios para Tocumen.
La Terminal 2 de Tocumen fue adjudicada a Odebrecht en 2012 y su construcción inició en 2013 con un presupuesto inicial de 679 millones de dólares, pero finalmente superó los 900 millones. Se espera un informe técnico de la Universidad Tecnológica de Panamá sobre los hundimientos en la plataforma de estacionamiento de aeronaves en la Terminal 2, lo que ha afectado la operatividad de seis de las 20 puertas de embarque. Las reparaciones necesarias podrían superar los 15 millones de dólares, según estudios preliminares.
Odebrecht, que cambió su nombre a CNO después del escándalo de sobornos que involucró a varios países de la región, enfrenta consecuencias por sus prácticas corruptas en Panamá. La empresa fue investigada por el pago de sobornos, lo que resultó en un acuerdo con la Fiscalía de Panamá en 2017 para pagar una multa de 220 millones de dólares al Estado en un plazo de 12 años, acuerdo que no ha cumplido. Este caso es parte del mayor escándalo de corrupción en la historia de Panamá, que involucra a expresidentes, exministros y familiares de estos.
El juicio contra una veintena de personas imputadas en el escándalo de corrupción está programado para iniciar a finales de este año o principios de 2025, después de varias suspensiones. Odebrecht ha sido señalada como una de las empresas centrales en el esquema de corrupción, lo que ha generado repercusiones legales y financieras en Panamá y otros países de la región. La condena en el laudo arbitral es un paso más en la búsqueda de responsabilizar a la empresa por sus acciones ilícitas en el país.