El presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), Celso Marranzini, reveló que en República Dominicana alrededor de 800 mil usuarios no pagan la luz, lo cual considera preocupante para la sostenibilidad de los negocios. Marranzini expresó que es fundamental facturar lo que se vende para que un negocio sea sustentable, y destacó que es una deficiencia de las empresas distribuidoras no facturar adecuadamente el consumo de electricidad.
Marranzini lamentó la alta cantidad de usuarios que no pagan el servicio de energía eléctrica, lo cual calificó como histórico. Además, resaltó la existencia de conexiones ilegales que también representan pérdidas para el Estado. Para abordar esta problemática, se han destinado 650 millones de dólares para las tres distribuidoras, con el apoyo de entidades bancarias internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El presidente de CUED mencionó que uno de los retos para el año 2027 es eliminar gran parte de estas pérdidas y mejorar la eficiencia en la facturación de los servicios. Señaló que actualmente hay un alto porcentaje de usuarios conectados ilegalmente a quienes no se les factura ni se les cobra, lo cual impacta en la viabilidad financiera de las empresas distribuidoras y en la recaudación de fondos para el Estado.
La problemática de los usuarios que no pagan la luz en República Dominicana es un tema que preocupa a las autoridades y al sector eléctrico en general. El presidente Marranzini hizo un llamado a fortalecer los mecanismos de control y supervisión para garantizar que todos los usuarios cumplan con sus obligaciones de pago, y destacó la importancia de implementar medidas efectivas para reducir las conexiones ilegales y mejorar la gestión del cobro de los servicios.
El sector eléctrico en el país enfrenta desafíos significativos en términos de eficiencia y sostenibilidad financiera, debido a la alta morosidad y las conexiones ilegales que afectan la recaudación de fondos. Es fundamental implementar estrategias y políticas que promuevan el pago oportuno de los servicios eléctricos y que contribuyan a reducir las pérdidas generadas por estos usuarios que no pagan por el consumo de energía.
En conclusión, la falta de pago de la luz por parte de un gran número de usuarios en República Dominicana representa un desafío importante para el sector eléctrico y la sostenibilidad de los negocios en este ámbito. Es necesario tomar medidas contundentes para mejorar la eficiencia en la facturación, reducir las conexiones ilegales y fortalecer los mecanismos de cobro, con el fin de garantizar la viabilidad financiera de las empresas distribuidoras y la recaudación de fondos para el Estado.