El Día Mundial de la Salud Sexual se celebra el 4 de septiembre y tiene como objetivo promover la conciencia sobre la importancia de la salud sexual. La buena salud sexual abarca el bienestar físico, emocional y social, incluyendo experiencias sexuales placenteras y seguras. Se enfatiza la importancia del respeto y la protección de los derechos humanos en las relaciones sexuales.
Es fundamental que las decisiones importantes en una relación, como tener hijos o el uso de anticonceptivos, se tomen de mutuo acuerdo entre ambas partes. La comunicación es clave para mantener una relación sexual saludable. Se debe evitar todo tipo de agresión física o verbal, así como el coito forzado. El consentimiento mutuo es la base para un encuentro sexual saludable, tal y como se promovió en la campaña del año pasado impulsada por la Asociación Mundial para la Salud Sexual.
En muchos países, incluido el caribeño, la sexualidad sigue siendo un tema tabú y los padres evitan hablar con sus hijos sobre métodos anticonceptivos, enfermedades de transmisión sexual y el respeto por sus cuerpos en el ámbito sexual. Es necesario reflexionar sobre los avances logrados y los desafíos persistentes en el acceso a una educación sexual integral y a servicios de salud sexual apropiados. La falta de información y formación en este ámbito contribuye a la propagación de enfermedades como el VIH.
Según cifras del Ministerio de Salud Pública y la Organización Panamericana de la Salud, en el país caribeño se estima que unas 79,000 personas están afectadas por el VIH, con 4,100 nuevas infecciones y 1,500 muertes al año. Esto revela la necesidad de intensificar las advertencias y la formación en materia de salud sexual. Se proponen iniciativas como campañas en redes sociales para promover el uso de protección, talleres gratuitos en escuelas públicas sobre derechos sexuales y reproductivos, y la concienciación sobre el carácter consensuado del acto sexual.
En resumen, el Día Mundial de la Salud Sexual busca concienciar sobre la importancia de mantener una buena salud sexual, que incluye aspectos físicos, emocionales y sociales. Se enfatiza la importancia del consentimiento mutuo, la comunicación y el respeto en las relaciones sexuales. Es fundamental abordar la falta de información y formación en materia de salud sexual, especialmente en países donde sigue siendo un tema tabú. Se proponen iniciativas para promover el uso de protección, ofrecer educación sexual integral y fomentar la concienciación sobre los derechos sexuales y reproductivos.