Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel, ha reafirmado que su país no cederá el control militar de la divisoria de Gaza con Egipto con el fin de llegar a un posible acuerdo para la liberación de rehenes. En un discurso reciente, Netanyahu insistió en que es necesario controlar el corredor de Filadelfia, una franja de 14 kilómetros que conecta el cruce de Kerem Shalom con el Mar Mediterráneo. Según su punto de vista, controlar este corredor es crucial para ejercer presión sobre Hamás, evitar su rearme y lograr que acepten un acuerdo favorable para Israel, que aún tiene 97 rehenes en la Franja tras casi 11 meses de combates.
Netanyahu afirmó que si Israel cede ahora control militar de la divisoria de Gaza después del asesinato de seis rehenes la semana pasada, sería como enviar el mensaje a Hamás de que pueden obtener más concesiones si siguen matando cautivos. Considera que esto no solo sería inmoral, sino también una locura, ya que equivaldría a premiar el terrorismo. A su parecer, mantener el control del corredor de Filadelfia es la única forma de garantizar que Hamás no aproveche la situación para fortalecerse y seguir atacando a Israel.
Por otro lado, la defensa del abogado Edmundo González Urrutia ha denunciado una violación al derecho fundamental de la presunción de inocencia. Esta denuncia se produce en un contexto en el que Israel se enfrenta a la difícil situación de liberar a los rehenes en Gaza sin ceder demasiado a las demandas de Hamás. La situación se complica aún más tras los recientes asesinatos de rehenes en la Franja, lo que ha llevado a Netanyahu a mantener su postura firme de no ceder el control militar del corredor de Filadelfia.
En este sentido, Netanyahu considera que ceder ahora sería contraproducente y enviaría un mensaje equivocado a Hamás. Afirma que, al hacer concesiones después de los asesinatos de rehenes, estarían premiando a los perpetradores de actos terroristas y alentando futuros ataques. Por tanto, insiste en que mantener el control del corredor de Filadelfia es la mejor estrategia para presionar a Hamás y lograr un acuerdo favorable para Israel en términos de liberación de rehenes.
La situación en Gaza sigue siendo delicada y compleja, con Israel enfrentando un dilema moral y estratégico en relación con la liberación de rehenes. Por un lado, la presión internacional y la preocupación por la vida de los cautivos hacen que Israel se vea obligado a negociar con Hamás. Por otro lado, no ceder el control militar del corredor de Filadelfia es una forma de mantener la presión sobre Hamás y evitar que obtengan ganancias a través de la violencia.
En conclusión, la postura de Netanyahu de no ceder el control militar de la divisoria de Gaza con Egipto es parte de una estrategia más amplia para presionar a Hamás y asegurar un acuerdo que beneficie a Israel en términos de liberación de rehenes. A pesar de las críticas y presiones internacionales, el primer ministro israelí ha dejado en claro que no permitirá que las acciones violentas de Hamás se vean recompensadas con concesiones. La situación en Gaza sigue siendo incierta, pero Israel está decidido a mantener su postura firme en medio de un escenario de violencia y negociaciones complicadas.