A una década de su partida, la sociedad dominicana todavía siente la ausencia de Yaqui Núñez del Risco, un maestro del buen hablar y una ilustre figura de la televisión dominicana. Falleció a los 75 años en 2014, después de luchar contra las secuelas de un accidente cerebrovascular que sufrió en 2008. Durante su vida, fue un comunicador completo, destacándose en múltiples roles como publicista, poeta, periodista, productor y actor. Su presencia en programas como "El Show del Mediodía" lo convirtieron en una figura amada y respetada en el país.
Yaqui Núñez era conocido por su perfecta dicción y su habilidad para improvisar de forma oportuna en televisión en vivo. Siempre enfatizó la importancia de enriquecer el vocabulario y corregir errores comunes en la comunicación, mostrando su disposición para formar a nuevos comunicadores en la televisión. Sus últimas palabras y preocupaciones quedaron plasmadas en su columna diaria en el LISTÍN DIARIO, donde escribía sobre diversos temas y experiencias personales. Expresaba su inquietud por la grosería y la vulgaridad presentes en la música y los medios de comunicación.
Además de su carrera en televisión, Yaqui Núñez incursionó en la radio con programas como "Salud, Dinero y Amor" junto a su esposa Susana Silfa. En televisión, destacó en programas como "Otra vez con Yaqui", donde contó con un excelente equipo de guionistas. También fue reconocido por sus trabajos en programas como "El Tiempo pasa", "Comida y Comidilla", "Global y Local" y "La Alegría del país". Como compositor, escribió canciones para artistas como Fernando Villalona, Wilfrido Vargas y Milly Quezada, apadrinando la carrera de talentos como Glenis Díaz y Gotas de Ámbar.
Su legado como figura integral en los medios de comunicación y la cultura dominicana perdura hasta el día de hoy. Recordado por su sabiduría, conocimiento y maestría en el arte de la comunicación, Yaqui Núñez del Risco dejó una huella imborrable en la televisión y la radio del país. Su capacidad para inspirar a las nuevas generaciones de comunicadores y su compromiso con la excelencia y el respeto en la comunicación lo convierten en un referente insustituible en la historia de la comunicación en la República Dominicana. A diez años de su partida, su legado sigue vivo en la memoria y el corazón de quienes lo admiraron y respetaron.