En los vecindarios dominicanos del Alto Manhattan, se han registrado varios casos de violencia en las últimas semanas, incluyendo apuñalamientos y tiroteos que han dejado personas muertas y heridas. En un período de pocos días, se han reportado cuatro apuñalamientos contra presuntas personas dominicanas en la zona.
En los incidentes recientes, dos hombres resultaron apuñalados en los sectores de Washington Heights e Inwood. Uno de ellos, de 32 años, fue atacado en la estación del tren A en la calle 207 con Broadway, mientras que el otro fue apuñalado en el parque de Riverside con la calle 143. Ambos fueron trasladados al hospital para recibir atención médica.
Además de estos casos, se conoce que un joven de 17 años fue apuñalado por la espalda en la avenida Saint Nicholas con la calle 174. Asimismo, un hombre de 39 años, presuntamente de origen dominicano, fue apuñalado en la estación del tren 1 en la avenida Saint Nicholas con la calle 191. Estos eventos reflejan la violencia que ha impactado a la comunidad dominicana en esta área de la ciudad.
Trágicamente, el músico dominicano Johnny Medina perdió la vida a causa de puñaladas en la estación del tren A en la calle 175 con la avenida Fort Washington. Además, durante una balacera frente a la salida del tren 1 en la calle 207 con la avenida Décima, dos personas fallecieron, una de ellas de origen dominicano, y una tercera resultó herida. Dos semanas después, se produjo otro tiroteo en las cercanías de esta estación.
La violencia no ha cesado, ya que otro hombre, presumiblemente dominicano, resultó herido por apuñalamiento en la estación del tren 1 en la 10 avenida con la calle 215. En otro incidente, una persona, también presuntamente de origen dominicano, fue arrollada por un tren en la parada de la calle 181 con la avenida Saint Nicholas. Estos episodios violentos continúan impactando a la comunidad hispana en la zona.
Estos recientes actos de violencia han generado preocupación en la comunidad dominicana y en las autoridades locales, quienes buscan mejorar la seguridad en estos vecindarios afectados. Es fundamental abordar las causas subyacentes de la violencia y trabajar en colaboración con la comunidad para prevenir futuros incidentes. La salud mental y el bienestar de los residentes también son aspectos importantes a considerar en este contexto de violencia.