El miércoles, el euro cayó a 1,1008 dólares después de que el índice de precios al consumo de Estados Unidos bajara cuatro décimas en agosto hasta el 2,5% interanual. La moneda única se cotizaba a 1,1008 dólares alrededor de las 15:00 GMT, por debajo de los 1,1019 dólares del día anterior. El Banco Central Europeo fijó el tipo de cambio en 1,1043 dólares. La inflación en Estados Unidos descendió al 2,5% interanual, su nivel más bajo desde febrero de 2021, pero todavía por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal.
La inflación subyacente se mantuvo en el 3,2% interanual y aumentó tres décimas de forma mensual. Los analistas de Bankinter consideran que estos niveles podrían llevar a la Fed a comenzar a disminuir las tasas el 18 de septiembre, aunque no se espera que la reducción sea de 50 puntos básicos. Durante la jornada, se llevó a cabo un debate entre los candidatos a la Casa Blanca en las elecciones del 5 de noviembre, Kamala Harris y Donald Trump, en el que, según los analistas de Banca March, Harris salió reforzada.
Estos acontecimientos tuvieron lugar un día antes de que el BCE anunciara su decisión sobre los tipos de interés, la cual se espera que recorte en un cuarto de punto, situando la facilidad de depósito en el 3,5%, según los expertos. Este recorte sería una medida para estimular la economía y contrarrestar los efectos de la desaceleración económica. La posibilidad de una disminución en los tipos de interés por parte del BCE podría tener efectos en el valor del euro frente al dólar, lo cual es importante para los mercados financieros y los inversores.
La situación económica, tanto en Estados Unidos como en Europa, es un factor clave en la fluctuación de las divisas y en las decisiones de política monetaria de los bancos centrales. La inflación es un indicador importante para medir la salud económica de un país y para determinar las políticas monetarias adecuadas. Los mercados financieros están atentos a eventos como debates electorales y decisiones de bancos centrales, ya que estas pueden tener un impacto significativo en los tipos de cambio y en la confianza de los inversores.
Ante la incertidumbre económica global y los riesgos políticos, es fundamental seguir de cerca los indicadores económicos y las decisiones de los bancos centrales para comprender la evolución de las divisas. La relación entre el euro y el dólar es especialmente relevante, ya que ambos son monedas importantes a nivel internacional y su valor puede influir en los mercados financieros. Por lo tanto, es importante estar informado sobre los factores que afectan a la cotización de estas divisas y cómo pueden impactar en la economía mundial.