La directora de la Penitenciaría del Litoral, María Daniela Icaza, fue asesinada en un atentado mientras se dirigía al Hospital del Guasmo Sur en Guayaquil, Ecuador. El ataque ocurrió en la carretera entre Daule y Guayaquil, donde hombres armados interceptaron su vehículo y dispararon contra ella. Otro funcionario de prisiones que la acompañaba resultó herido en el incidente. A pesar de ser trasladada con vida al hospital en un principio, Icaza falleció posteriormente a causa de sus heridas.
El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI) confirmó la muerte de Icaza, que era la directora de la cárcel más grande y poblada de Ecuador. El atentado ha conmocionado al país, generando múltiples reacciones y preocupación por la seguridad de los funcionarios penitenciarios. La Penitenciaría del Litoral se encuentra en Guayaquil, donde se desarrolló el trágico suceso que puso en peligro la vida de Icaza y su acompañante.
El incidente ha sido condenado por autoridades y ciudadanos, quienes exigen justicia y el esclarecimiento de los hechos para identificar a los responsables del asesinato de Icaza. La seguridad en las cárceles ecuatorianas ha sido cuestionada en repetidas ocasiones debido a la violencia y la presencia de bandas criminales. El SNAI ha anunciado que se tomarán medidas para garantizar la protección de los funcionarios penitenciarios y fortalecer la seguridad en las instituciones carcelarias.
María Daniela Icaza era reconocida por su trabajo en la administración penitenciaria y su compromiso con la reinserción social de las personas privadas de libertad en Ecuador. Su trágica muerte ha generado consternación en la comunidad penitenciaria y en la sociedad en general, que lamenta la pérdida de una profesional dedicada a mejorar las condiciones de vida dentro de las cárceles. Las autoridades han expresado sus condolencias a la familia y amigos de Icaza.
El asesinato de la directora de la Penitenciaría del Litoral ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de los funcionarios de prisiones en Ecuador y la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en las instituciones carcelarias. Se espera que las investigaciones sobre el atentado arrojen resultados pronto para esclarecer las circunstancias del crimen y llevar a los culpables ante la justicia. La comunidad espera que se haga justicia por la muerte de María Daniela Icaza y que su legado en el ámbito penitenciario perdure como un ejemplo de dedicación y compromiso.