El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, expresó su preocupación por las explosiones de dispositivos ‘buscapersonas’ en Líbano, que se han atribuido a Israel y han costado la vida a doce personas. Guterres advirtió que estas explosiones indican un riesgo grave de escalada en el conflicto entre la milicia libanesa Hizbulá y el Estado de Israel.
Las explosiones de los dispositivos ‘buscapersonas’ ocurrieron de manera simultánea en diferentes lugares de Líbano, principalmente en el sur del país y en los suburbios meridionales de Beirut, causando al menos doce muertes y cerca de 3.000 heridos. La operación fue atribuida por Hizbulá a Israel, con quien mantienen un conflicto fronterizo desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre.
António Guterres destacó la relación entre lo que está sucediendo en Líbano y en Gaza, señalando que Hizbulá ha lanzado estas operaciones en respuesta a lo que ocurre en Gaza y que cesarán cuando haya un alto el fuego en esa región. El político portugués hizo hincapié en la importancia de evitar cualquier escalada en el conflicto en Líbano y trabajar para lograr la paz y la estabilidad en la región.
Durante una rueda de prensa en la sede de la ONU en Nueva York, Guterres alertó sobre la multiplicación de conflictos a nivel internacional y la sensación de impunidad que prevalece en la actualidad. Advirtió que los riesgos de una nueva guerra mundial son mayores en el contexto actual, destacando la necesidad de evitar acciones que puedan desencadenar una escalada de violencia en la región.
El secretario general de la ONU hizo un llamado a la comunidad internacional para trabajar juntos en la prevención de conflictos y la promoción de la paz. Expresó su preocupación por la impunidad con la que actúan algunas entidades militares o milicias, señalando que en la actualidad existe una sensación de que pueden hacer lo que quieran sin consecuencias, a diferencia de la Guerra Fría donde existía un mayor temor a una guerra mundial.
En medio de la crisis en Líbano y la escalada de tensiones en la región, António Guterres instó a la diplomacia para resolver los conflictos y evitar una mayor violencia. Subrayó la importancia de la cooperación internacional y el diálogo para lograr la estabilidad en el Medio Oriente. Guterres pidió a todas las partes involucradas que busquen soluciones pacíficas y eviten acciones que puedan desencadenar un conflicto a gran escala en la región.