La propuesta de fusión del Ministerio de Educación Superior (Mescyt) con el Ministerio de Educación (Minerd) ha generado críticas por parte de María Teresa Cabrera, experta educativa, quien considera que esta medida compromete la calidad de la enseñanza. Cabrera advierte que esta fusión pone en riesgo el 4% del presupuesto destinado actualmente a la educación preuniversitaria, una conquista de 14 años que teme pueda ser desviada hacia otras áreas del sistema educativo.
El gobierno ha defendido la propuesta argumentando que la fusión de ambos ministerios busca optimizar el gasto educativo y mejorar la estrategia de distribución de recursos. Sin embargo, según Cabrera, esta medida refleja una falta de prioridad en garantizar una formación académica eficiente, ya que considera que no ha existido la voluntad política para destinar la inversión requerida para la educación preuniversitaria. La experta critica que esta fusión busque reducir el presupuesto asignado a la educación preuniversitaria y repartirlo en otras áreas del sistema educativo, sin tomar en cuenta a los niños y niñas que aún no tienen acceso a la educación formal.
María Teresa Cabrera también señala que el país enfrenta importantes desafíos relacionados con la calidad educativa que requieren acciones concretas y recursos suficientes. La experta destaca la necesidad de garantizar que todos los niños del país tengan acceso a la educación preuniversitaria, recordando que la Constitución dominicana establece desde 1997 que todo niño a partir de los tres años debe tener garantizado un lugar en una institución educativa. A pesar de esto, persiste una brecha del 20% de niños que aún no están inscritos en el sistema educativo.
Cabrera enfatizó las diferencias que surgen entre un niño que comienza su educación a los tres años y otro que ingresa varios años después, creando una fisura social que nunca se cierra. Los niños que inician su educación a una edad temprana desarrollan habilidades clave como la autonomía, creatividad y regulación emocional, mientras que aquellos que empiezan más tarde ven afectada su trayectoria académica. Antes de considerar reformas como la fusión de ministerios, la experta insiste en la importancia de garantizar el acceso de todos los niños a la educación preuniversitaria.
Finalmente, María Teresa Cabrera lamenta que, después de años de lucha por asegurar un financiamiento adecuado para el sector educativo, ahora se contemple una reducción de estos fondos, considerando que esto representa un retroceso en los avances logrados. La experta hace un llamado a priorizar la educación preuniversitaria y garantizar que todos los niños tengan acceso a la educación desde una edad temprana, para así cerrar la brecha existente y promover una educación de calidad en el país.