Israel ha lanzado una gran ofensiva contra el sur del país por cuarto día consecutivo con bombardeos simultáneos en cientos de puntos, provocando preocupación internacional. El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su alarma ante la posibilidad de que Líbano se convierta en "otra Gaza". Las fuerzas israelíes afirman estar atacando lanzamisiles de Hezbolá, aunque residentes libaneses desvinculados de la milicia indican que también están siendo bombardeados territorios sin presencia del grupo armado, incluyendo campos agrícolas clave para la subsistencia de miles de personas.
Fuentes de seguridad israelíes han asegurado que la violencia en Líbano aumentará en las próximas horas, con el Ejército hebreo preparándose para lanzar una ofensiva a gran escala que afectará a todo el país. El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, ha enviado un mensaje de advertencia a los civiles libaneses en áreas utilizadas por Hezbolá, instándolos a huir de sus hogares. A su vez, muchos habitantes del sur de Líbano están recibiendo mensajes en sus teléfonos celulares instándoles a abandonar el territorio, lo que genera tensión en la población.
El ejército israelí lanzó una advertencia a la población libanesa, pidiendo la evacuación de zonas donde Hezbolá esconde sus armas, antes de bombardear objetivos del grupo en el sur y el este de Líbano. Este conflicto comenzó el 7 de octubre con el lanzamiento de cohetes por parte de Hezbolá en apoyo a Hamás en la Franja de Gaza. Los civiles libaneses observan con preocupación el avance de los acontecimientos, recordando la impunidad con la que Israel destruyó Gaza y temiendo que puedan ser los siguientes en sufrir las consecuencias de la violencia.
La situación en Líbano se torna cada vez más peligrosa con la escalada de la violencia por parte de Israel, que se prepara para una ofensiva a gran escala en todo el país. A pesar de que las fuerzas israelíes dicen estar atacando objetivos de Hezbolá, los residentes libaneses denuncian que también están siendo afectados territorios sin presencia de la milicia, lo que agrava la crisis humanitaria en la región. La advertencia del Ejército israelí a la población civil de abandonar sus hogares ha generado temor y tensión en el país.
La comunidad internacional sigue con atención el conflicto en Líbano, con el secretario general de la ONU expresando su preocupación por la escalada de la violencia y el riesgo de una crisis humanitaria en la región. Los bombardeos israelíes contra Hezbolá han provocado una respuesta violenta por parte del grupo armado, generando un círculo vicioso de retaliaciones que amenaza con empeorar la situación. Los civiles libaneses se encuentran atrapados en medio de este conflicto, con temor por la escalada de la violencia y las posibles consecuencias para la población civil en el país.
La situación en Líbano se complica aún más con la advertencia del Ejército israelí a la población civil de evacuar zonas donde se encuentran armas de Hezbolá, mientras se prepara para intensificar sus ataques en todo el país. La incertidumbre y el miedo se apoderan de los habitantes del sur de Líbano, que temen convertirse en el blanco de los bombardeos y sufrir las devastadoras consecuencias de la violencia. La comunidad internacional insta a detener la escalada del conflicto y buscar una solución pacífica para evitar una catástrofe humanitaria en la región.
