Eugene Edward 'Mercury' Morris, quien fuera corredor de los Miami Dolphins invictos de 1972 y dos veces campeón del Super Bowl de la NFL, falleció a los 77 años. El equipo de los Dolphins expresó su profunda tristeza por la pérdida de Morris, destacando su impacto duradero a través de su juego dinámico, personalidad y récords. Morris fue clave en los Dolphins de la década de 1970 que triunfaron en los Super Bowls VII y VIII, siendo parte del equipo perfecto de 1972.
En la temporada de 1972, Morris fue líder de la liga en anotaciones con 12 touchdowns y logró alcanzar las 1,000 yardas. Junto a su compañero Larry Czonka, quien corrió para 1,117 yardas, formaron el primer dúo en la historia de la NFL en alcanzar las 1,000 yardas en una temporada. Morris, nacido en Pittsburgh, Pennsylvania, se destacó en el fútbol colegial con West Texas A&M y recibió el apodo de 'Mercury' por su rapidez y capacidad atlética.
Morris llegó al fútbol americano profesional en 1969, siendo seleccionado por Miami en el Draft AFL-NFL. Formó parte de uno de los grupos de corredores más destacados en la historia de la liga junto a Larry Czonka y Jim Kiick. Durante su carrera con los Dolphins, Morris fue seleccionado a tres Pro Bowls consecutivos entre 1971 y 1973, participando en los Super Bowls VI, VII, y VIII, logrando dos campeonatos.
En 1975, Morris jugó su último año con los Dolphins antes de ser traspasado a los San Diego Chargers, donde solo actuó en la campaña de 1976. En 1982, Morris enfrentó problemas legales y fue condenado por tráfico y posesión de cocaína, recibiendo inicialmente una sentencia de 20 años en prisión. Sin embargo, luego de cumplir tres años tras un acuerdo de culpabilidad, fue liberado. Posteriormente, Morris se convirtió en un orador motivacional y participó en un anuncio de servicio público hablando sobre su tiempo en prisión.
La partida de Mercury Morris dejó una gran tristeza en la comunidad del sur de Florida y en el mundo del fútbol americano. Su legado perdurará a través de su impacto en el campo de juego, su personalidad carismática y sus récords en la NFL. Los Dolphins expresaron sus condolencias a la familia, seres queridos y compañeros de equipo de Morris, recordándolo como un miembro querido del equipo perfecto de 1972 y un campeón de la NFL. Su contribución al deporte y su historia de superación lo convierten en una figura emblemática en la historia del fútbol americano.