La Leucemia Linfoblástica Aguda (LLA) es un tipo de cáncer de la sangre en el cual la médula ósea produce una cantidad excesiva de glóbulos blancos anormales. Este tipo de leucemia se presenta principalmente en niños de entre uno y cuatro años, siendo curable en un 70% de los casos en México, según afirmó el director médico de Amgen México. En países con más recursos, como Estados Unidos o Canadá, la tasa de curación puede llegar hasta el 90%. Sin embargo, la posibilidad de curación disminuye en pacientes adultos mayores de cincuenta años debido a la agresividad de los tumores y la intolerancia al tratamiento.
La detección temprana de la LLA es fundamental para su curación. Los síntomas como infecciones recurrentes, anemia, malestar general y sangrados sin causa aparente son signos de alerta. El tratamiento consta de tres fases: inducción, consolidación y mantenimiento, con una duración aproximada de dos a tres años. En la actualidad, se ha desarrollado un medicamento biespecífico para el tratamiento de la LLA, el cual permite unir las células tumorales con los linfocitos T para destruir el tumor. A pesar de los avances en tratamiento, aún hay desafíos en América Latina en cuanto a la disponibilidad de infraestructura y personal médico especializado.
El tratamiento de la LLA requiere un equipo multidisciplinario con hematólogos y otros especialistas. En América Latina, el acceso a estos servicios puede ser limitado para pacientes que viven lejos de las grandes ciudades, lo que dificulta el seguimiento y tratamiento adecuado de la enfermedad. En México, se registran alrededor de 5.000 nuevos casos de leucemia en menores de diecinueve años cada año, mientras que en Colombia se ha observado un incremento del 37% en pacientes menores de dieciocho años con LLA. En Perú, se diagnostican alrededor de 1.300 casos de cáncer en niños anualmente, siendo la leucemia uno de los tipos más comunes.
Los avances en el tratamiento de la LLA han mejorado las tasas de curación, especialmente en niños. Sin embargo, aún existe la necesidad de fortalecer los sistemas de salud en América Latina para garantizar un acceso equitativo a la atención médica especializada. La detección temprana y el inicio oportuno del tratamiento siguen siendo fundamentales para mejorar el pronóstico de los pacientes con LLA. A pesar de los desafíos presentes en la región, existen tratamientos efectivos y se trabaja en la formación de equipos médicos capacitados para brindar atención de calidad a los pacientes con leucemia.