La tormenta tropical Kirk se encuentra en aguas abiertas del Atlántico y se prevé que se convierta en un huracán hoy, alcanzando posiblemente la categoría mayor el jueves próximo, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Con vientos máximos sostenidos de 95 km/h, se desplaza hacia el oeste-noroeste a 22 km/h, ubicándose a unas 1.505 km al oeste de las islas africanas de Cabo Verde sin amenazar zonas costeras.
El NHC monitorea dos áreas de baja presión en el Atlántico que podrían convertirse en depresiones o tormentas tropicales en los próximos días. Una de ellas se encuentra en el suroeste del Mar Caribe, produciendo fuertes tormentas en su avance hacia el Golfo de México con un 40% de posibilidades de desarrollo. La otra área de baja presión, cerca de Cabo Verde, podría convertirse en una depresión tropical en las próximas 48 horas mientras se desplaza sobre el este de la cuenca atlántica.
En medio de estas condiciones, las autoridades del sureste de Estados Unidos continúan con labores de recuperación tras el impacto del huracán Helene, que causó devastación en Florida, Georgia, las Carolinas, Virginia y Tennessee. La temporada de huracanes en el Atlántico, que empezó el 1 de junio, se espera que tenga una actividad por encima del promedio, con entre 8 y 13 huracanes y entre 4 y 7 de categoría mayor, según la NOAA.
En cuanto a Kirk, actualmente se encuentra lejos de zonas pobladas y no representa una amenaza. Sin embargo, se espera su fortalecimiento en los próximos días, convirtiéndose en un huracán y posiblemente alcanzando la categoría mayor. Mientras tanto, las autoridades continúan alerta y monitoreando la evolución de la tormenta y de las otras áreas de baja presión en el Atlántico.
La temporada de huracanes en el Atlántico ha sido activa hasta el momento, con varios fenómenos registrados en la región. A medida que avanza el tiempo, se espera que la actividad ciclónica siga presente en el área, por lo que se recomienda a la población mantenerse informada y preparada ante posibles eventos climáticos. Los pronósticos meteorológicos y las alertas tempranas son fundamentales para prevenir daños y tomar medidas de precaución adecuadas.