En los últimos cuatro meses del año 2024, cuatro intérpretes de merengue han fallecido, dejando un legado de alegría en la sociedad dominicana. Ray López, Juan Cruz, Orlando Alonzo y Raffy Matías han sido despedidos por la comunidad artística dominicana. Raffy Matías, conocido como "La voz más dulce del merengue", falleció el 2 de octubre después de luchar contra diversas enfermedades. Desde su juventud en Jarabacoa, se destacó como baladista antes de incursionar en el merengue. Su música ha dejado historias de amor y desamor en canciones como "Quiero saber de ti" y "Ahora que te vas", con las que se ganó el cariño de su público.
Por otro lado, Orlando Alonzo, también conocido como "El Peluche", falleció dos días antes que Raffy Matías. Era el vocalista principal de la agrupación típica "El Norte" y había trabajado con leyendas del merengue como Wilfrido Vargas. Su partida dejó al merengue típico de luto, ya que era una de las voces más reconocidas en el género. Por su parte, Juan Cruz, cantante y corista de música típica, también falleció en agosto debido a un infarto al corazón. Su trayectoria con la agrupación "El Prodigio" lo hizo uno de los más grandes cantantes del merengue típico de todos los tiempos.
Otro merenguero que nos dejó fue Ray López, conocido como "El Misil", quien hizo carrera en Puerto Rico con el grupo de merengue Zona Roja. Cantante y compositor de grandes éxitos, Ray también formó parte de agrupaciones importantes en República Dominicana antes de mudarse a Puerto Rico. Su estilo y movimientos característicos le valieron el apodo de "El hombre del cuello de goma". Estos cuatro merengueros han dejado un legado musical que perdurará en la cultura dominicana por mucho tiempo, recordando la alegría y la pasión que pusieron en cada una de sus interpretaciones.
La comunidad artística dominicana se ha visto afectada por la partida de estos talentosos merengueros, quienes dedicaron su vida a la música y dejaron un legado que seguirá presente en la memoria colectiva del país. A través de sus canciones, historias de amor y desamor, estos artistas han contribuido al patrimonio musical dominicano. Su música seguirá siendo recordada y apreciada por el público, siendo parte inseparable de la identidad cultural del país. A pesar del dolor por su ausencia, es reconfortante recordarlos por el impacto positivo que tuvieron en la sociedad dominicana a través de su música.