Gilbert Gómez, dirigente de los Tigres del Licey, compartió su experiencia con niños que practican béisbol en la Academia La Javilla. A pesar de no lograr su sueño de ser jugador de Grandes Ligas, Gómez encontró un camino en el béisbol como entrenador y manager.
Durante la charla, Gómez destacó la importancia de mantener la fe, ser positivo y trabajar duro. Él mismo experimentó un cambio en su vida al pasar de ser jugador a entrenador, una transición que le llevó a reconocer que Dios tenía otro propósito para él en el deporte.
Gómez fue firmado por los Mets de Nueva York en 2009 y seleccionado por los Tigres del Licey en el draft de novatos de 2012. A pesar de su corta carrera como jugador profesional, decidió retirarse a los 25 años para seguir trabajando en el béisbol en roles de entrenador.
El exjugador expresó que, aunque al principio fue difícil aceptar que no seguiría en el campo de juego, siempre tuvo claro que quería seguir involucrado en el béisbol de alguna manera. Su dedicación y perseverancia lo llevaron a convertirse en manager de los Tigres del Licey y coach en los Estados Unidos.
Gómez enfatizó la importancia de no rendirse y mantener la fe en momentos de dificultad. A través de su historia, transmitió a los niños la importancia de seguir luchando por sus sueños, incluso cuando las circunstancias parecen adversas.
En resumen, la charla de Gilbert Gómez en la Academia La Javilla fue un recordatorio de que, a pesar de los obstáculos y cambios inesperados, siempre hay un propósito para cada persona. Su historia inspiradora motiva a los niños a seguir adelante en su carrera deportiva y a no perder la esperanza en la búsqueda de sus metas en el béisbol y en la vida.
