El caso de la extradición de Julian Assange a los Estados Unidos ha dado un giro inesperado después de que el presidente Joe Biden admitiera que están considerando retirar los cargos en su contra. Esta petición se da a raíz de una solicitud del gobierno australiano, aliado de Estados Unidos, que desea que Assange regrese a su país de origen, Australia. Biden respondió a la pregunta de un periodista sobre esta petición diciendo "Lo estamos considerando", sin dar detalles adicionales. Assange lleva cinco años en prisión preventiva en Londres y Estados Unidos ha estado intentando su extradición durante 12 años para juzgarlo por espionaje y piratería de documentos publicados en Wikileaks.
La Corte Suprema británica ha solicitado garantías judiciales a la fiscalía estadounidense antes de autorizar la extradición, y la decisión final está fijada para el 20 de mayo. Sin embargo, es posible que para esa fecha los cargos contra Assange hayan sido retirados. La esposa y abogada de Assange, Stella Assange, ha pedido públicamente a Joe Biden que retire los cargos. Para ella, la única solución se encuentra en el ámbito político, y considera que este cambio de actitud puede ser una señal positiva después de tantos años de lucha.
Estados Unidos solicitó la extradición de Assange por publicar más de 700.000 documentos clasificados sobre actividades militares y diplomáticas, lo que le podría llevar a una condena de 175 años de cárcel. Sus partidarios consideran que Assange destapó irregularidades en el ejército estadounidense y luchan por la libertad de prensa. Por otro lado, Washington argumenta que sus filtraciones pusieron vidas en peligro al revelar nombres de fuentes de inteligencia. El editor jefe de Wikileaks aboga por una solución política a este caso y critica el tiempo que Assange ha pasado en prisión.
La justicia británica ha pedido a Estados Unidos nuevas garantías sobre el trato que se le daría a Assange en caso de ser extraditado, de lo contrario podría concederle un último recurso en el Reino Unido. Antes de su arresto, Assange pasó siete años en la embajada de Ecuador en Londres para evitar una extradición a Suecia por cargos de asalto sexual que luego fueron descartados. La situación de Assange ha generado apoyo en la sociedad civil y se han realizado manifestaciones en su favor en Londres. La posibilidad de retirar los cargos contra Assange representa un cambio inesperado en su caso, que ha generado controversia a nivel internacional.