Las autoridades en Florida han anunciado multas de hasta 25,000 dólares para especuladores que se están aprovechando de la situación provocada por el huracán Milton. Se ha detectado manipulación de precios y acaparamiento de bienes básicos, lo que ha generado escasez y altos costos para los residentes. Incluso se ha creado una línea telefónica especial para denuncias, con el objetivo de combatir estas prácticas ilegales. Muchos ciudadanos han reportado dificultades para encontrar gasolina, alimentos y otros suministros esenciales a precios razonables.
Los residentes de Florida están enfrentando serios problemas a causa de la situación provocada por el huracán Milton. Muchas personas se han visto obligadas a pagar precios exorbitantes por productos básicos como propano y agua potable. Algunos incluso han intentado evacuar hacia otros lugares, como Puerto Rico, pero se han encontrado con precios excesivamente altos en los vuelos. Las autoridades, incluyendo la vicepresidenta Kamala Harris y el gobernador Ron DeSantis, han instado a los ciudadanos a denunciar a los especuladores que se aprovechan de la crisis.
Las leyes en Florida prohíben subir los precios de bienes esenciales como alimentos, gasolina, agua y habitaciones de hotel durante situaciones de crisis como la provocada por el huracán Milton. Aquellos que sean sorprendidos especulando podrían enfrentar multas de hasta 1,000 dólares por infracción y hasta 25,000 dólares por múltiples violaciones en un período de 24 horas. Las autoridades han dejado claro que tomarán medidas en contra de aquellos que intenten lucrarse a costa de la comunidad en momentos de dificultad.
La situación en Florida se ha vuelto aún más complicada para los residentes que se enfrentan a la escasez de suministros esenciales y a los altos precios impuestos por los especuladores. Muchos han tenido que lidiar con la imposibilidad de evacuar debido a la falta de recursos económicos para costear varios días fuera de sus hogares. Asimismo, la escasez de gasolina ha dificultado la movilidad de las personas, lo que ha generado un aumento en la demanda y, por ende, en los precios.
Aunque las autoridades afirman que no hay motivos para la escasez de combustible, los ciudadanos continúan enfrentando dificultades para encontrar gasolina a precios razonables. Muchos han tenido que recorrer varias estaciones de servicio hasta que finalmente logran abastecerse. La situación se ha vuelto preocupante para aquellos que no pueden permitirse evacuar y deben enfrentar la crisis en sus hogares, con recursos limitados y precios excesivos en los productos básicos.
La fiscal del condado Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle, ha destacado la importancia de denunciar a los especuladores que intentan sacar provecho de la crisis en Florida. Explicó que explotar una crisis no solo es antiético, sino también ilegal, y que su oficina tomará medidas enérgicas contra aquellos que intenten beneficiarse de las dificultades de la comunidad. Las autoridades federales, como la vicepresidenta Kamala Harris, también han instado a los ciudadanos a denunciar estas prácticas ilegales y a solidarizarse en tiempos de crisis.