El trágico asesinato de Givaldo José Vicente de Deus en 1999 marcó la vida de su familia para siempre. Gislayne Silva de Deus, de 9 años en ese entonces, presenció la muerte de su padre a manos de Raimundo Alves Gomes, quien le disparó en un barrio de Boa Vista, Brasil. A pesar de la tragedia, Gislayne decidió buscar justicia y venganza, convirtiéndose en policía para poder arrestar al hombre que le arrebató a su padre.
Después de años de estudiar Derecho y finalmente unirse a la Policía Penal de Roraima en 2022, Gislayne tuvo la oportunidad de buscar a Gomes. Tras ingresar a la Policía Civil y unirse a la Delegación de Homicidios, comenzó a recopilar información sobre el paradero del asesino. En septiembre de 2024, finalmente logró capturar a Gomes en una zona rural de Boa Vista, cerrando así un ciclo de 25 años en busca de justicia.
Durante el arresto, Gislayne enfrentó a Gomes cara a cara y le dijo que finalmente pagaría por su crimen. La emoción de ese momento fue abrumadora para ella, ya que después de tanto tiempo de espera, finalmente había logrado que se hiciera justicia. Aunque la captura de Gomes no devolverá a su padre, Gislayne sintió que había logrado cumplir la promesa que se hizo a sí misma muchos años atrás y que su familia finalmente podría encontrar paz.
El arresto de Gomes fue un paso significativo para Gislayne y su familia, quienes sintieron que finalmente se había hecho justicia. A pesar de la satisfacción de ver al culpable tras las rejas, Gislayne es consciente de que el arresto no traerá de vuelta a su padre. Sin embargo, está segura de que Gomes cumplirá la pena que debió haber cumplido hace muchos años y que al menos podrán encontrar paz y cerrar ese doloroso capítulo de sus vidas.
La perseverancia y determinación de Gislayne en buscar justicia por la muerte de su padre es un ejemplo de valentía y fortaleza. A pesar del dolor que ha atravesado a lo largo de los años, decidió convertir su sufrimiento en acción y luchar incansablemente hasta lograr el arresto de Gomes. Su historia es un recordatorio de que la justicia puede tardar, pero eventualmente se cumplirá, y que el amor y la determinación pueden superar incluso las adversidades más difíciles y trágicas.
En definitiva, el arresto de Raimundo Alves Gomes representa el cierre de un ciclo de dolor y lucha para Gislayne y su familia. A través de su dedicación y valentía, logró cumplir su promesa y buscar justicia para su padre, demostrando que incluso en los momentos más oscuros, la luz de la justicia puede brillar con fuerza. Su historia es un testimonio de la importancia de nunca rendirse y seguir adelante en busca de verdad y justicia, sin importar cuánto tiempo lleve o cuántos obstáculos se presenten en el camino.