Los abogados de Sean "Diddy" Combs han solicitado a un juez de Nueva York que obligue a los fiscales a revelar los nombres de las acusadoras en su caso de tráfico sexual. Combs, de 54 años, se encuentra encarcelado sin derecho a fianza tras su arresto por tráfico sexual el 16 de septiembre. Sus abogados argumentan que necesita conocer las identidades de las presuntas víctimas para poder prepararse adecuadamente para el juicio, el cual está programado para el 5 de mayo. La solicitud de identificar a los acusadores surge después de que se presentaron seis nuevas demandas contra Combs de forma anónima, alegando que utilizó su fama para persuadir a las víctimas a asistir a fiestas lujosas donde las agredía.
Dos de los acusadores en las demandas fueron identificados como Jane Doe, mientras que cuatro hombres fueron incluidos como John Doe. Estas demandas forman parte de un grupo de más de 100 acusadores que están planeando emprender acciones legales contra Combs. Sus abogados justifican la necesidad de conocer las identidades de las acusadoras debido a la cantidad de personas que los acusan, atribuyendo esto a la celebridad y riqueza de Combs, así como a la publicidad de demandas previas en su contra. Se menciona que una de esas demandas fue presentada por su exnovia, Cassie, cuyas acusaciones de abuso sexual y físico han generado controversia.
Los abogados de Combs alegan que las "declaraciones falsas e incendiarias" de los agentes federales, junto con la fama de su cliente, han resultado en un gran número de acusaciones por parte de denunciantes no identificados, que van desde lo falso hasta lo absurdo. Consideran que estas acusaciones crean un circo mediático que podría perjudicar el derecho de Combs a un juicio justo. Argumentan que el gobierno debería identificar a las presuntas víctimas, ya que Combs no tiene forma de saber en qué acusaciones se basan los fiscales en la acusación formal presentada en su contra.
La acusación formal alega que Combs coaccionó y abusó de mujeres durante años, utilizando chantaje y actos violentos para evitar que las víctimas hablaran. Se menciona también que el caso contra Combs es único debido a la cantidad de acusadores que ha enfrentado, lo que según sus abogados se debe a su estatus de celebridad y la publicidad de demandas previas. Sin embargo, hasta el momento, los jueces han determinado que Combs representa un peligro para la comunidad y se mantiene encarcelado sin derecho a fianza. Sus abogados han solicitado que se le permita quedar en libertad bajo vigilancia electrónica para prepararse para el juicio.
En su carta al juez Arun Subramanian, los abogados de Combs expresan que las acusaciones en su contra han creado un circo mediático que podría privarle de un juicio justo si no se controla. Consideran fundamental que el gobierno revele las identidades de las presuntas víctimas para que Combs pueda presentar una defensa adecuada. Por otro lado, los fiscales han declinado hacer comentarios sobre este aspecto del caso, manteniendo la confidencialidad de las acusadoras. El caso de Sean "Diddy" Combs continúa generando controversia y expectación en el ámbito legal y mediático, mientras el proceso judicial avanza hacia el juicio programado para mayo.