Un fenómeno meteorológico conocido como DANA, que significa "Depresión Aislada en Niveles Altos", se caracteriza por una zona de baja presión en las capas altas de la atmósfera. A pesar de tener consecuencias similares a la gota fría, los expertos prefieren no asociar ambos términos debido a que la DANA es más técnica y específica en su definición.
La DANA se origina en las capas altas de la atmósfera, a unos 9.000 metros de altitud, provocando intensas corrientes zonales que se mueven rápidamente. Estas corrientes polares, como la corriente en chorro, separan el aire frío polar del aire más cálido en la latitud de España, generando condiciones propicias para la formación de una DANA.
Este fenómeno se produce cuando las corrientes en chorro presentan grandes ondulaciones y se estrangulan, formando un embolsamiento de aire frío aislado con sentido de giro ciclónico. Se crean así las condiciones necesarias para una DANA: depresión en altura aislada y aire frío en zonas medias de la troposfera.
Una DANA afecta principalmente a la zona del Mediterráneo debido a un gradiente térmico entre las diferentes capas de la atmósfera. Cuando las masas de aire frío se encuentran con temperaturas cálidas en superficie y en la superficie del agua, se generan tormentas intensas y precipitaciones copiosas, especialmente en el Mediterráneo occidental y oriental.
Estos eventos pueden causar daños significativos en zonas costeras como Valencia y Málaga, así como en el interior de la península, como en la provincia de Albacete. Las DANA pueden desencadenar situaciones de meteorología adversa y provocar inundaciones y otros eventos climáticos extremos, siendo importante estar preparados para estos fenómenos.
Es crucial comprender la naturaleza y las condiciones que favorecen la formación de una DANA para poder prever y mitigar sus impactos en las zonas afectadas. La combinación de aire frío en altura, temperaturas cálidas en superficie y humedad en el Mediterráneo puede desencadenar fuertes tormentas y precipitaciones intensas, lo que subraya la importancia de la vigilancia y la preparación ante estos eventos meteorológicos extremos.