Alexander Ogando es un joven de 23 años que destaca por su pasión, disciplina y trabajo duro. Se encuentra bajo la tutela de su entrenador, Félix Sánchez, a quien considera como un padre y quien le ha dado buenos consejos. Su peso ideal para correr es de 160 libras y tiene como objetivo lograr medallas de oro en los 200 metros y 400 planos en los próximos Juegos de París. Ogando reconoce la importancia de la perseverancia y la entrega para alcanzar el éxito en cualquier actividad de la vida.
El atleta recuerda sus inicios en el mundo del atletismo, cuando comenzó a entrenar en 2016 y fue llevado a Santo Domingo para competir en la preselección nacional en 2019. A pesar de las críticas que recibió por su deseo de convertirse en un atleta de élite, nunca se rindió y siguió adelante con determinación. Inspirado por el éxito de Félix Sánchez y Luguelín Santos en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, Ogando decidió seguir sus pasos y comenzó a entrenar duro para alcanzar su meta.
El joven atleta recuerda los sacrificios que tuvo que hacer para entrenar, como caminar largas distancias desde su casa hasta el estadio olímpico en San Juan de la Maguana, o pedir aventones en la carretera. A pesar de las dificultades, siempre contó con el apoyo de su abuelo y el profesor Elías P., quien lo reclutó en la escuela para practicar atletismo. Tras dos años de entrenamiento, su profesor habló con su abuela para obtener el permiso de llevarlo a Santo Domingo a entrenar con la Federación de Atletismo.
En sus gustos personales, Alexander Ogando revela que es un fiel seguidor del equipo de béisbol Licey y de su ídolo, Emilio Bonifacio. También disfruta de la música de Juan Luis Guerra y las bachatas de Ramón Torres. En cuanto a deportes, sigue de cerca a figuras como Lebron James, Kobe Bryant y Usain Bolt. Aunque tiene interés en estudiar Administración de Empresas y Marketing, su pasión por el atletismo y el béisbol siempre estará presente en su vida.