La candidata presidencial demócrata Kamala Harris se enfrenta a su rival republicano, Donald Trump, en un debate en vivo en Filadelfia, Pensilvania. El evento durará unos 90 minutos, sin público presente. Los micrófonos de los candidatos permanecerán apagados durante la intervención del contrario, y no podrán interactuar con sus asesores de campaña durante los cortes comerciales. Harris eligió su lugar en el escenario, mientras que Trump tendrá la última palabra. Las declaraciones de los candidatos serán clave para ganar el apoyo de los indecisos en un momento en el que las encuestas muestran poca distancia.
En las declaraciones previas al debate, Harris criticó a Trump por sus discursos monótonos, mientras que Trump afirmó que con Kamala Harris, Estados Unidos se convertirá en una "Venezuela con esteroides". Ambos candidatos defendieron sus posturas sobre diferentes temas, como los aranceles y la prohibición del aborto a las seis semanas. Harris calificó la política de Trump sobre el aborto como un insulto para las mujeres, mientras que Trump la llamó "marxista" y aseguró que no tiene un plan de gobierno. Harris también arremetió contra Trump por su supuesta implicación en el Proyecto 2025, un plan controvertido de propuestas políticas.
Durante el debate, Harris centró sus respuestas en sus propuestas para apoyar a familias y pequeñas empresas, criticando a Trump por su enfoque en recortes de impuestos para millonarios y grandes corporaciones. Trump, por su parte, rechazó estas acusaciones y afirmó que impondría aranceles a las importaciones extranjeras. Ambos candidatos se dieron un apretón de manos antes de comenzar el debate, que durará 90 minutos y presentará sus argumentos a los votantes estadounidenses. Se espera que las declaraciones de los candidatos durante el debate tengan un impacto crucial en la carrera presidencial, especialmente entre los indecisos.
En un momento clave de la campaña presidencial, Kamala Harris y Donald Trump se enfrentaron en un debate en vivo en Filadelfia, Pensilvania. Harris criticó a Trump por sus discursos monótonos y lo describió como egocéntrico, mientras que Trump afirmó que con Harris, Estados Unidos se convertirá en una "Venezuela con esteroides". Ambos candidatos defendieron sus posturas sobre temas como aranceles, prohibición del aborto y derechos reproductivos. Harris calificó la política de Trump sobre el aborto como un insulto para las mujeres, mientras que Trump la llamó "marxista" y aseguró que no tiene un plan de gobierno.
Durante el debate, Harris centró sus respuestas en sus propuestas para apoyar a familias y pequeñas empresas, criticando a Trump por su enfoque en recortes de impuestos para millonarios y grandes corporaciones. Trump afirmó que impondría aranceles a las importaciones extranjeras y defendió su postura sobre el aborto y otros temas. Ambos candidatos buscaron influir en los indecisos a través de sus declaraciones, con la esperanza de ganar su apoyo crucial en un momento en el que las encuestas muestran poca distancia entre ellos. El debate duró 90 minutos, sin público presente, y ambos candidatos presentaron sus argumentos de manera directa a los votantes estadounidenses.