La Cámara de Diputados aprobó préstamos al Poder Ejecutivo por un total de US$625 millones con entidades financieras internacionales, destinados a programas de acción climática y mejoramiento de redes eléctricas por parte de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDES). Estos incluyen un contrato con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por US$300 millones para el Programa de Acción Climática, un convenio con la Agencia Francesa de Desarrollo por US$100 millones para apoyo presupuestario, y un acuerdo con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) por US$225 millones para mejorar las redes eléctricas.
Las críticas de la oposición se centran en la alta cantidad de recursos aprobados, que representan alrededor del 32 % de los recursos que el gobierno intentaba recaudar con un proyecto de Modernización Fiscal. Se cuestiona el otorgamiento de recursos a las empresas distribuidoras de electricidad, alegando que estas no son capaces de gestionar adecuadamente su propio suministro de energía. Se señala además que en poco más de cuatro años, el Congreso ha aprobado un total de US$1,280 millones para el sector energético.
El vocero del bloque de diputados del partido Fuerza del Pueblo (FP), Rafael Castillo, expresó su preocupación por la entrega de recursos a empresas que no son eficientes en la distribución de energía. Criticó el préstamo de US$225 millones para el sector eléctrico, mostrando ejemplos de ineficiencias en las empresas distribuidoras. Por su parte, Gustavo Sánchez, vocero del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), destacó que República Dominicana es uno de los países que más paga en intereses por los ingresos que recibe, lo que afecta significativamente la deuda del país.
El diputado Ramón Raposo, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), sugirió la formación de comisiones de legisladores para vigilar el destino de los préstamos, propuesta que fue bien acogida por el presidente del hemiciclo, Alfredo Pacheco. Se argumenta que es importante garantizar la transparencia en el uso de estos recursos y evitar posibles desvíos o malversaciones. Se menciona además la construcción de las plantas de Punta Catalina, consideradas polémicas por algunos sectores políticos, y se invita a demostrar si fueron sobrevaluadas.
A pesar de las críticas y cuestionamientos de la oposición, los préstamos fueron aprobados por la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados. La preocupación por el endeudamiento del país, los altos intereses pagados y la necesidad de una mayor supervisión sobre el uso de los recursos son temas clave en este debate. Se destaca la importancia de garantizar que los préstamos se utilicen de manera efectiva para beneficiar a la población y promover el desarrollo sostenible en República Dominicana.