El ciclismo es una actividad saludable que puede conllevar dolor en el asiento y la postura de la bicicleta, especialmente en el área perineal y púbica. Los ciclistas experimentan diferentes quejas y molestias en el aparato genito-urinario debido al tiempo prolongado de ejercicio y pedaleo, así como a ajustes inapropiados de la bicicleta, técnicas incorrectas o entrenamiento inadecuado. El sobrepeso del ciclista también puede aumentar la presión en la región perineal, por lo que se recomienda realizar actividades complementarias para reducir este riesgo al montar en bicicleta. Patologías como la disfunción sexual y la hematuria pueden ser consecuencia de la presión en el perineo durante la práctica del ciclismo.
La región más afectada al montar en bicicleta es la tuberosidad isquiática y el perineo, donde el glúteo mayor actúa como un cojín en el sillín. La flexión repetida de cadera y la posición del tronco en flexión durante el pedaleo pueden comprimir estructuras nerviosas y vasos sanguíneos, lo que podría provocar patologías como disfunción sexual y hematuria. A pesar de esto, es importante destacar que la evidencia científica que respalda estas posibles patologías es limitada, por lo que no deben ser motivo de alarma para los ciclistas. El atrapamiento del nervio pudendo es la afección más común en ciclistas, tanto en hombres como en mujeres, y suele manifestarse con entumecimiento genital.
A pesar de las posibles patologías relacionadas con el ciclismo, como la disfunción sexual y la hematuria, es importante destacar que la evidencia científica que respalda estas condiciones es limitada. El atrapamiento del nervio pudendo es una de las afecciones más comunes en ciclistas, tanto en hombres como en mujeres, y suele manifestarse con entumecimiento genital. Aun así, se recomienda a los ciclistas visitar a un urólogo si tienen alguna duda o preocupación relacionada con su salud sexual o urinaria. Es crucial que los ciclistas practiquen el deporte de forma segura y consciente, tomando medidas preventivas como ajustar adecuadamente la bicicleta, utilizar ropa y sillines adecuados, y realizar actividades complementarias para fortalecer los músculos y reducir el riesgo de lesiones o molestias en el área perineal.