En una rueda de prensa en el Centro de Retención Vehicular de Villa Mella, Santo Domingo Norte, el director de la DIGESETT, general Francisco Osoria De La Cruz, informó sobre la cantidad de motocicletas confiscadas debido a carreras clandestinas. En total, se han incautado 173 motocicletas que fueron utilizadas en estas actividades ilegales, representando un peligro para la seguridad vial y la tranquilidad ciudadana.
El general Osoria De La Cruz resaltó que en lo que va de año han fallecido alrededor de 5 personas a causa de las carreras clandestinas, subrayando la importancia de prevenir estas situaciones y promover comportamientos responsables en las vías públicas. Hizo un llamado a los jóvenes dedicados a esta práctica ilegal para que la abandonen, ya que están poniendo en peligro sus vidas y las de los demás, instándolos a utilizar lugares autorizados para este tipo de actividad.
Además, el director de la DIGESETT enfatizó la presencia de servicios de inteligencia en todo el país para identificar a aquellos que participan en carreras clandestinas, asegurando que serán sometidos a la justicia. Es crucial que se respeten las normas de tránsito y se eviten comportamientos peligrosos que puedan poner en riesgo la vida de los ciudadanos en las vías públicas. La prevención y la concienciación son clave para evitar tragedias.
La confiscación de motocicletas utilizadas en carreras clandestinas es parte de las medidas tomadas por las autoridades para combatir este tipo de actividades ilegales. Se busca crear conciencia en la población sobre los riesgos asociados con estas prácticas y promover un comportamiento responsable entre los conductores de vehículos, especialmente entre los jóvenes. Es esencial que se respeten las leyes de tránsito y se eviten situaciones que puedan resultar en accidentes graves.
La colaboración de la ciudadanía en la prevención de carreras clandestinas es fundamental para garantizar la seguridad vial en el país. Es importante denunciar cualquier actividad ilegal que ponga en peligro la vida de los ciudadanos y trabajar juntos para evitar tragedias en las vías públicas. La educación vial y la concienciación de los riesgos asociados con comportamientos imprudentes son clave para fomentar una cultura de respeto y responsabilidad en la conducción de vehículos.
En resumen, la lucha contra las carreras clandestinas y otras actividades ilegales en las vías públicas es una tarea que requiere la participación de todos, desde las autoridades hasta la ciudadanía. Es necesario promover una cultura de respeto por las normas de tránsito y la seguridad vial, así como trabajar juntos para prevenir accidentes y tragedias en las carreteras. La educación y la concienciación son herramientas fundamentales para lograr una convivencia segura y armoniosa en las vías públicas.