En Madrid, del 24 de mayo, se exhibe la exposición "Alegoría Dominicana", donde el escultor Juan Trinidad explora la autenticidad de la identidad dominicana, fruto del mestizaje de taínos, españoles y africanos. La muestra presenta una serie de tótems que combinan formas africanas con patrones caribeños, reflejando la riqueza multicultural de la sociedad dominicana y la responsabilidad del artista con su continuidad y preservación. Trinidad se siente responsable de proteger la identidad dominicana y se inspiró en una experiencia en Bonao, ciudad donde reside, donde sintió la llamada de los ancestros. Esta experiencia lo llevó a trabajar la madera de árboles caídos, dando una segunda vida a estos materiales y creando obras que reflejan la sensibilidad y características del pueblo dominicano.
El escultor se abastece de troncos caídos de agricultores y ganaderos locales, convirtiéndolos en esculturas que transmiten sensibilidad, paciencia y ecuanimidad, consideradas características de los dominicanos. Trinidad busca alcanzar la autenticidad a través de su materia prima y su filosofía, creando piezas que reflejan la identidad y la historia de República Dominicana. Para el artista, utilizar lo que la naturaleza ya no necesita es una forma de respetar el legado y hacer escultura del pasado para pensar en el futuro. Su trabajo con la madera de árboles caídos es una forma de preservar y proteger la identidad y las raíces dominicanas.
La exposición "Alegoría Dominicana" busca reflexionar sobre la riqueza cultural de la sociedad dominicana y la importancia de preservar y proteger la identidad del pueblo a través del arte. Trinidad se siente responsable de esta tarea y se inspira en la historia, la naturaleza y la llamada de los ancestros para crear obras que reflejan la esencia del pueblo dominicano. Utilizando troncos caídos como materia prima, el escultor busca transmitir la autenticidad y las características de los dominicanos en sus esculturas, que combinan formas africanas con patrones caribeños.
La muestra exhibe una quincena de tótems que representan la diversidad cultural y la mezcla de influencias de taínos, españoles y africanos en la identidad dominicana. Trinidad explora la autenticidad del pueblo dominicano a través de su arte, utilizando la madera de árboles caídos para crear esculturas que transmiten sensibilidad y paciencia, características que considera propias de los dominicanos. Su trabajo refleja su compromiso con la preservación de la identidad dominicana y su responsabilidad como artista de proteger y transmitir las raíces y la historia del país.
La experiencia de Trinidad en Bonao, donde sintió la llamada de los ancestros mientras se encontraba cerca de un árbol caído, fue fundamental para despertar en él la inquietud por proteger lo que es propio y dar una segunda vida a la madera de los árboles caídos. Esta experiencia lo llevó a interesarse por la historia y la identidad dominicana, inspirándolo a crear obras que reflejan la esencia del pueblo dominicano. A través de la exposición "Alegoría Dominicana", el escultor busca transmitir la autenticidad de su pueblo y su compromiso con la preservación de sus raíces y su identidad multicultural.