Dioelmi Cabrera, conocido como "El de lo video" en las redes sociales, perdió la vida junto a su pareja, Yohanna Vélez, en un accidente de tráfico. Ambos viajaban en un motor cuando fueron impactados por un vehículo y fallecieron. Dioelmi era conocido por sus videos de humor donde hablaba en voz alta, cantaba o simulaba discusiones en público. Tenía una gran cantidad de seguidores en Instagram y TikTok, llegando a crear una comunidad en redes sociales. También tenían una tienda de ropa juntos, que comenzó en su casa vendiendo ropa usada y luego se expandió a un local más grande.
Dioelmi y Yohanna eran no solo pareja, sino también un equipo de trabajo. Ella solía grabar sus videos y lo acompañaba en todas sus grabaciones, apoyándolo en su carrera de influencer. Dioelmi había alcanzado una gran popularidad con sus videos realizados en espacios públicos, como el que se volvió viral cuando cantó una canción de Bulin 47 en la calle. Su audiencia creció rápidamente y se convirtió en su principal fuente de ingresos, después de ser despedido de su trabajo por dedicarse por completo a las redes sociales.
El influencer también fue reconocido por su creatividad y dedicación a su trabajo. Hizo varios videos en los que interactuaba con desconocidos en la calle, capturando sus reacciones de sorpresa o diversión. Sus publicaciones alcanzaban millones de reproducciones y recibían miles de likes. Además de su faceta como creador de contenido, Dioelmi también era emprendedor, ya que junto a su pareja habían logrado establecer un negocio de venta de ropa que había crecido significativamente en poco tiempo.
La noticia de la trágica muerte de Dioelmi y Yohanna conmocionó a sus seguidores y a la comunidad de las redes sociales en general. Muchos expresaron su dolor y su apoyo a través de mensajes y publicaciones en homenaje a la pareja. Dioelmi había logrado ganarse el cariño y la admiración de sus seguidores, quienes valoraban su autenticidad y su humor. Su legado como creador de contenido y emprendedor quedará en la memoria de quienes lo seguían y apreciaban su trabajo.
La pérdida de Dioelmi y Yohanna deja un vacío en la comunidad de las redes sociales, donde ambos eran figuras queridas y respetadas. Su ausencia se sentirá en cada nuevo video que ya no podrán crear juntos, en cada publicación que ya no podrán compartir. A pesar del dolor de su partida, su legado perdurará en las risas y alegrías que compartieron a través de sus videos y emprendimientos. Descansen en paz, Dioelmi y Yohanna, y que su luz siga brillando en el corazón de quienes los admiraban y querían.