Según el director de la OPS, Jarbas Barbosa, el 90% de las muertes por dengue en América Latina y el Caribe son evitables. En lo que va de año se han registrado más de 11,8 millones de casos de dengue en la región, con 6.838 muertes. La atención primaria se presenta como fundamental para combatir los casos graves de dengue transmitido por el mosquito Aedes aegypti. En el marco del 61 Consejo Directivo de la OPS, se discutirá este tema y la importancia del fortalecimiento de la formación de profesionales de la salud para identificar rápidamente los signos y síntomas del dengue.
La explosión de casos de dengue, mayormente en Brasil, Argentina y México, se atribuye a factores como el cambio climático, El Niño y la urbanización sin una infraestructura adecuada. El mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, ha demostrado una gran capacidad de adaptación, llegando a zonas más frías y altas. En este contexto, se destaca la importancia de estrategias como la vacunación, aunque actualmente la vacuna disponible no es eficaz para interrumpir un brote. La OPS trabaja en la formación del personal sanitario y en el control del vector, realizando inspecciones para eliminar los criaderos del mosquito.
Además de la epidemia de dengue, la OPS también ha registrado un aumento de casos de fiebre Oropouche, transmitida por jejenes infectados, principalmente en Brasil. A pesar de que esta enfermedad solía provocar casos leves, en esta ocasión se han detectado casi 10.000 casos, con dos muertes asociadas y una transmisión vertical de madre a feto. Durante las reuniones en Washington, la OPS abordará también la prevención de enfermedades no transmisibles, el acceso a medicamentos y la transformación digital en salud.
Barbosa destaca la importancia de continuar trabajando para lograr una vacuna efectiva contra el dengue y para controlar la transmisión de enfermedades por vectores como zika, chikunguña y fiebre amarilla. La prevención de muertes por dengue a través de la identificación rápida de síntomas y la eliminación de criaderos del mosquito son fundamentales en la lucha contra esta enfermedad. La OPS también está investigando la situación de la fiebre Oropouche, ante el aumento de casos detectados y la gravedad de algunos de ellos, incluyendo muertes y transmisión vertical. En este contexto, la organización busca encontrar soluciones efectivas para abordar estas enfermedades transmitidas por vectores.