El Comisionado de Béisbol Profesional del Caribe, Juan Francisco Puello Herrera, lamentó la partida física de Osvaldo Virgil, el primer dominicano en llegar a las Grandes Ligas. Virgil abrió las puertas para más de 980 peloteros dominicanos que han debutado en las grandes ligas desde 1956. Además, destacó la gran carrera de Virgil en el béisbol de Venezuela y su labor como instructor y asesor en diversos equipos de las grandes ligas, incluyendo los Mets de Nueva York.
Osvaldo Virgil falleció a los 92 años mientras recibía atención médica en Montecristi, su provincia natal. El expelotero se convirtió en el primer jugador negro en aparecer en un partido de los Tigres de Detroit en 1958. Conocido como "El Orégano", Virgil fue un pionero para los dominicanos que han desfilado por las Grandes Ligas desde su debut a los 23 años con los Gigantes de Nueva York en 1956.
La familia del béisbol en la República Dominicana y el Caribe está de luto por la pérdida de Osvaldo Virgil, quien también era asesor del equipo de los Mets de Nueva York en la academia en Boca Chica. Su legado como primer dominicano en las Grandes Ligas y su trayectoria como jugador y coach en Venezuela deja un vacío en el mundo del béisbol y un gran referente en el deporte nacional y del Caribe.
Juan Francisco Puello Herrera destacó el papel de Virgil en la historia del béisbol dominicano y su contribución al desarrollo de futuros talentos en el deporte. Desde su debut en 1956, Virgil abrió las puertas para cientos de peloteros dominicanos que han seguido sus pasos en las Grandes Ligas. Su legado como pionero y su dedicación al béisbol son recordados con cariño por la familia del béisbol en el país y en la región caribeña.
Osvaldo Virgil, el primer dominicano en jugar en las Grandes Ligas, dejó un legado imborrable en el béisbol dominicano y caribeño. Su fallecimiento a los 92 años representa una pérdida significativa para la comunidad deportiva. Como jugador y coach, Virgil fue un referente en el béisbol de Venezuela y su labor como asesor en los Mets de Nueva York en la academia en Boca Chica será recordada con gratitud y admiración.
La muerte de Osvaldo Virgil ha conmovido a la comunidad deportiva en la República Dominicana y el Caribe, donde es recordado como un ícono del béisbol y un ejemplo a seguir para las futuras generaciones de peloteros dominicanos. Su legado como pionero y su dedicación al deporte son un recordatorio de la importancia de la pasión y el compromiso en el mundo del béisbol. Con su partida física, se despide a uno de los grandes referentes del béisbol dominicano y del Caribe, cuyo impacto perdurará en la historia del deporte en la región.